Bari es la capital de la región italiana de la Puglia (o Apulia, en español).
Aunque lo habitual es que la ciudad suponga la puerta de entrada a un viaje por la región más suroriental de Italia (lo que habitualmente llamamos la bota de Italia), nosotros llegamos a Bari en una escala de crucero, de manera que sólo pudimos dedicarle 1 día.
Tiempo suficiente, eso sí, para conocer los lugares más importantes que ver en Bari en 1 día. O, básicamente, en Bari Vecchia. Es decir, el barrio antiguo de la antaño amurallada Bari, que es donde encontramos los monumentos y lugares de mayor interés de la capital de la Puglia.
QUÉ VER EN BARI EN 1 DÍA
Estos son lugares que no os debéis perder al visitar Bari.
BARRIO VIEJO DE BARI
Bari Vecchia no sólo es la ciudad antigua y donde encontramos los monumentos más importantes que ver en Bari. Es también el corazón palpitante de la ciudad.
Bari Vecchia es un auténtico enjambre de estrechas callejuelas, con edificios unidos en ocasiones por arbotantes y a menudo con la colada tendida en los balcones. Todo muy sureño.
Un lugar lleno de vida, con sus comercios de toda la vida, bares y terrazas donde tomarse un buen café o panificio donde degustar su célebre focaccia (luego os hablo de ella).
Y también, desde luego, es el lugar donde encontramos algunos viejos palacetes y muchas iglesias, como la de los Jesuitas o las dos que os comentaré con más detalle: San Nicolás y San Sabino.
IGLESIA DE SAN NICOLÁS DE BARI
Incluso por encima de la Catedral, la iglesia Basílica de San Nicolás de Bari es el templo más importante que ver en Bari. Es románico y del siglo XII.
Esta iglesia alberga, en la cripta, los restos del santo patrón de la ciudad, llegados desde Asia Menor en 1087: San Nicolás de Bari, un obispo del siglo IV al que se le atribuyen no pocos milagros.
La cripta de la Basílica es una maravilla, con un precioso bosque de columnas con bellos capiteles, construida apenas un par de años después de la llegada de los restos del santo.
Curiosamente, en la misma cripta encontramos un pequeño oratorio ortodoxo. El motivo es que San Nicolás es también venerado por quienes profesan esta rama del cristianismo.
PANIFICIO FIORE
Muy cerca de San Nicolás, en la vía peatonal Strada Palazzo di Città, encontramos el horno donde se dice que preparan la mejor focaccia de Bari. Me refiero a Panificio Fiore.
Degustamos una focaccia de panceta y la verdad es que estaba riquísima.
Sin embargo, la auténtica de la ciudad es la focaccia Barese, con tomates y aceituna.
La focaccia barese y los panzerotti (una especie de empanadas) son dos de los pequeños tesoros de la gastronomía local. En Bari Vecchia encontraréis bastantes lugares donde comerlos.
CATEDRAL DE SAN SABINO
El segundo gran templo cristiano que ver en Bari es la catedral, que está dedicada a San Sabino.
Eso sí, si queréis visitar el interior de esta iglesia también románica y edificada en piedra calcárea durante el siglo XII, tendréis que pasar por taquilla.
Por cierto, el rosetón es protagonista de un curioso efecto, durante el solsticio de verano. Cada 21 de junio, los rayos del sol se filtran a través del citado rosetón de la fachada occidental, quedando encajando en un mosaico de mármol existente en el suelo del pasillo central. Lo llaman el Milagro de la Luz.
PIAZZA DEL MERCANTILE
Las calles de la ciudad vieja de Bari se abren a pequeñas plazas y a otras, bastante mayores.
Una de las más bonitas y amplias es la Plaza del Mercantile, uno de los corazones de la Bari medieval.
Ahí se encuentra el Palacio del Sedile, edificado a mediados del siglo XVI como sede del Consejo de Nobles y Jefes municipales.
En un lado de la plaza encontramos la desgastada Columna Infame o de la Justicia, también del siglo XVI. En esta céntrica columna de mármol blanco, antaño se exponían al escarnio a los ladrones y deudores.
CASTILLO NORMANDO SUEVO
Esta enorme fortificación es, probablemente, el edificio civil más importante que ver en Bari.
Aunque el origen de este castillo es normando, fue reconstruido y ampliado por Federico II a mediados del siglo XIII.
Desde hace menos de una década, el castillo desempeña las funciones de museo, por lo que se puede visitar, aunque nosotros solo lo recorridos por fuera. La verdad es que con sus torreones y con su amplio foso que lo rodea por tres de sus lados, el Castillo de Bari impresiona bastante.
ARCO BASSO Y CALLE DE LAS ORECCHIETTE
Desde el castillo tomamos una calle conocida como Calle de las Orecchiette. Es decir de las orejitas. Para acceder a ella pasamos por debajo del Arco Basso.
Las orejitas u orecchiette es la pasta típica de Bari. Reciben el nombre por la forma de oreja que tienen.
La cuestión es que en esta calle las elaboran a mano, en plena vía, un buen número de mujeres locales, antes de dejarlas secar al sol. Y las venden a los turistas, lógicamente.
Es un buen y barato recuerdo que llevarse a casa. 1 kilo de orecchiette nos costó 5 euros.
CORSO VITTORIO EMANUELE
Esta vía supone, en cierta manera, la separación entre Bari Vecchia y el ensanche moderno.
Corso Vittorio Emanuele es la principal arteria comercial de la ciudad, pero además de tiendas, terrazas y heladerías y restaurantes, merece la pena fijarse en el Teatro Niccoló Piccinni, que es el más antiguo de Bari o el edificio del Palazzo del Governo. Es decir, el ayuntamiento.
PUERTO VIEJO Y FORTINE DE SAN ANTONIO
Y termino esta lista de lugares obligados que ver en Bari con lo que queda de las murallas antiguas marítimas, justo enfrente del puerto antiguo y del que fue uno de sus torreones más importantes: el de San Antonio.
En su momento, había 4 fuertes incrustados en la muralla de Bari. Una construcción que la modernidad de llevó en buena parte por delante, pero del que se ha mantenido casi 1 km, entre Piazza del Ferrarese y Piazza San Pietro, y que se puede recorrer por su adarve.
El Fortino di Sant’Antonio Abate es, además, un buen lugar donde despedir el día. Se encuentra delante del Puerto Viejo (Muelle de San Antonio).
Estos son los lugares más interesantes que ver en Bari, capital y habitual puerta de entrada a la Puglia italiana, aunque nosotros solo dispusimos de unas horas para visitarla.