La Ruta del Sol es el nombre que recibe el recorrido entre Puno y Cuzco.
Aunque existe la posibilidad de tomar un autobús directo entre estas dos ciudades separadas por casi 400 kilómetros (unas ocho horas de viaje, con las paradas incluidas), resulta bastante más interesante tomar el autobús turístico (en realidad es esta la Ruta del Sol entre Puno y Cuzco).
Durante esta ruta en bus entre Puno y Cuzco se realizan cinco paradas: tres a lugares de interés turístico, una en el punto más alto de la ruta en bus entre Puno y Cuzco (el paso de la Raya) y otra para el almuerzo, que está incluido en el precio de la Ruta del Sol.
Además, comentar que antes de partir se nos entrega una bolsita con algunos tentempiés y agua y que en el bus viaja un guía turístico que nos ira comentando todo lo que iremos viendo durante la Ruta del Sol entre Puno y Cuzco y, especialmente, durante las paradas a los lugares de interés turístico.
La Ruta del Sol completa su recorrido en unas 10 horas, de manera que partiendo sobre las 7.30 de la mañana, llegamos a Cuzco algo más tarde de las 17.00.
Nosotros realizamos este trayecto en bus entre Puno y Cuzco con la empresa Turismo Mer y la verdad es que fue un acierto. Autobús cómodo, un guía que dio muy buenas explicaciones y un almuerzo más que correcto en el restaurante La Pascana de Sicuani.
RUTA DEL SOL. LAS PARADAS DEL BUS ENTRE PUNO Y CUZCO
Estas fueron las 5 paradas que realizamos durante la Ruta del Sol entre Puno y Cuzco.
MUSEO DE LA CULTURA PUCARÁ
La primera parada de la Ruta del Sol entre Puno y Cuzco la realizamos en la población de Pucará, que fue el epicentro de la cultura homónima.
Se sabe que en este lugar se han venido desarrollando distintas civilizaciones desde hace 10000 años, encontrándose incluso pinturas rupestres.
Sin embargo, el interesante Museo de la cultura Pucará se centra, básicamente, en esta civilización y en las que posteriormente ocuparon en lugar, como los collas y los incas.
Aquí veremos ejemplos de cerámica pucará, pero también tiwanaku, colla e inca o los curiosos monolitos y figuras antropomórficos pucará.
Muy interesantes resultan las dos momias (una colla y otra, inca) que fueron sepultadas en las necrópolis de Pucará, bajo chullpas como las existentes en la necrópolis de Sillustani que visitamos desde Puno.
Por último, el Museo de la cultura Pucará también nos habla de la importancia de la quinoa y la patata en la dieta del altiplano andino.
LA RAYA, EL PUNTO MÁS ALTO DE LA RUTA DEL SOL
En poco más de una hora llegamos a la segunda parada.
La realizamos en el Paso de la Raya, que es el límite entre las provincias de Puno y Cuzco y el punto más alto de la Ruta del Sol entre Puno y Cuzco, a 4335 metros sobre el nivel del mar.
En los últimos kilómetros hemos visto varios rebaños de alpacas y llamas, los dos camélidos que se domestican en Perú.
En el Paso de la Raya estamos apenas unos minutos para estirar las piernas, ir al baño quien lo desee o fotografiar la mole del Nevado de Chimboya, que con sus cumbres nevadas alcanza los 5489 metros de altitud.
Tras el Paso de la Raya, la Ruta del Sol deja el altiplano para ingresar en el Valle del Río Vilcanota. Descenderemos casi 900 metros para llegar al próximo punto, donde tenemos el almuerzo.
ALMUERZO EN LA RUTA DEL SOL ENTRE PUNO Y CUZCO, EN EL RESTAURANTE LA PASCANA DE SICUANI
La tercera parada del bus entre Puno y Cuzco la realizamos en el Restaurante La Pascana de Sicuani.
Se trata de un restaurante turístico situado en un bellísimo entorno, con cascadas y prados y con las montañas andinas como telón de fondo.
Como os dije, la comida tipo buffet está incluida en el precio de la Ruta del Sol. Un almuerzo variado que incluye platos vegetarianos, varios tipos de carne, frutas, café e infusiones.
Tras la comida, aún tenemos unos minutos para descansar en las hamacas del prado y fotografiarnos en el columpio, con la cascada como telón de fondo.
COMPLEJO ARQUEOLÓGICO DE RAQCHI
Necesitamos algo menos de media hora para acercarnos hasta el siguiente punto de interés en la Ruta del Sol entre Puno y Cuzco: el Complejo Arqueológico de Raqchi.
Raqchi no fue solo un importante centro ceremonial del Imperio Inca, si no que fue también una gran ciudad donde llegaron a convivir unas 100.000 personas. Esto, hasta que llegaron los españoles y lo quemaron casi todo.
Hicimos una visita guiada de unos 30 minutos y luego nos dejaron otra media hora para explorar el lugar por nuestra cuenta.
Lo más importante que se conserva, aunque parcialmente, es el Templo de Wiracocha. Se trata de un enorme complejo construido en piedra volcánica y adobe (nos comenta el guía que es la única construcción donde los incas utilizaron adobe). Aquí se rendía culto al Dios creador, Wiracocha.
Un templo que medía 92 metros de largo y del que se conserva el altísimo muro central, de casi 20 metros de altura, y el basamento de las columnas.
Otras construcciones que visitamos en Raqchi son las colcas o almacenes circulares, de piedra, que en números de 156 eran utilizadas como almacenes.
También pudimos conocer las viviendas donde vivían los sacerdotes y las de las vírgenes que eran sacrificadas, también edificadas en piedra volcánica perfectamente tallada (se pulían con obsidiana), los baños del Inca y el Camino Inca.
IGLESIA DE SAN PEDRO DE ANDAHUAYLILLAS, LA ÚLTIMA PARADA DE LA RUTA DEL SOL.
A una hora ya de Cuzco realizamos la última parada de la Ruta del Sol que nos ha llevado en autobús desde Puno.
Se realiza en el pequeño pueblo de Andahuaylillas, donde visitamos la iglesia de San Pedro.
Este templo fue alzado por los españoles sobre el que fue un templo inca que ellos mismos se encargaron de destruir.
Se trata de una iglesia de extraordinaria decoración barroca, hasta el punto que recibe el apelativo de Capilla Sixtina de Sudamérica.
Eso sí, entre bellísimos artesonados en el techo, pinturas murales evangilizadoras, lienzos de la escuela cuzqueña y columnas salomónicas en los múltiples retablos dorados, queda un conjunto que oscila entre lo deslumbrante y lo kitsch.
Una hora más de viaje y llegamos a Cuzco. Aproximadamente son las cinco y media de la tarde cuando el autobús de Puno a Cuzco nos deja en la que fuera la capital imperial de los Inca.
Definitivamente, la Ruta del Sol entre Puno y Cuzco es la mejor manera para completar el trayecto entre estas dos ciudades.