Spello ha sido una de las grandes sorpresas de nuestro viaje a Umbría, la región italiana de la que la ciudad de Perugia es la capital.
Aunque visitar Spello no entraba en los planos de viaje, una conversación con mi amiga María Teresa el día previo, hizo que incluyera este pequeño y precioso pueblo entre los lugares que visitar en Umbría.
Aunque nosotros nos alojamos en Perugia (en el Hotel Sangallo Palace del centro de la ciudad), llegar a Spello en transporte público desde Perugia es fácil. Especialmente en tren. La estación de Spello se localiza en la línea ferroviaria que une Perugia con Asís, Spoleto o Terni (esta última, puerta de entrada para visitar las Cascadas Marmore).
De la estación de Spello a Porta Consolare, puerta principal de acceso a la ciudad intramuros, hay un paseo de apenas 10 minutos a pie. El nombre de esta puerta ya nos indica que por Spello pasaron también los romanos. Eran los tiempos de la Colonia romana de Hispellum, aunque la población había sido fundada, anteriormente, por los umbros.
Esta monumental puerta da acceso a una población de tintes medievales y edificada completamente en piedra, que conserva buena parte sus murallas y puertas originales.
Pasear, gozando de sus pintorescos y fotogénicos rincones, es lo más importante que hacer en Spello, una población que se puede visitar bastante bien en tres o cuatro horas, aunque lo ideal sería quedarse a comer y disfrutarla con más calma.
Sin embargo, más allá de pasear, hay algunos lugares imprescindibles que ver en Spello y que no os deberíais perder durante vuestro paseo por la población.
QUÉ VER EN SPELLO EN 1 DÍA
PORTA CONSOLARE
Spello conserva tres de sus antiguas puertas romanas, además de restos de otras tres. La puerta principal es esta monumental Porta Consolare, que ya en la época romana constituía la principal puerta de acceso a la ciudad intramuros.
Por debajo del arco principal de acceso podemos ver restos del pavimento romano original. Esta puerta está edificada con piedra caliza procedente del Monte Subasio y está ornamentada con tres estatuas funerarias en su frontal.
SANTA MARÍA MAGGIORE Y CAPILLA BAGLIONI
Todo Spello es peatonal y está edificada en fuerte pendiente, de manera que tocará andar. Sin embargo, la población medieval es pequeña, de manera que todo queda bastante cerca. Lo primero que buscamos es la iglesia de Santa María Mayor.
Se trata de la más importante de las iglesias que ver en Spello, por albergar la Capilla Baglioni, decorada con frescos de Pinturicchio.
Santa María Mayor fue alzada en el siglo XII, aunque ha sido renovada en varias ocasiones. Dispone de una planta en forma de cruz latina, con una única una nave que se cierra en forma de bóveda de crucería.
Sería una iglesia bonita, sin más, si no fuera por esta maravillosa Capilla Baglioni, que fue encargada en 1500 por Troilo Baglioni a Bernardino di Betto, el pintor renacentista que ha pasado a la historia como Pinturicchio. En 1516, el Papa había decido el municipio a la familia Baglioni, procedentes de Perugia, que fueron amos y señores de Spello hasta 1648.
La Capilla Baglioni está decorada con frescos que incluyen escenas de la Anunciación, la Adoración de los pastores y la Llegada de los Reyes Magos y la Disputa con los doctores en el templo.
Además, no solo Pinturicchio dejó su huella en esta iglesia. Il Perugino, otro de los grandes pintores del Renacimiento italiano, pintó una Piedad, san Juan Evangelista y la Magdalena para el pilar izquierdo que queda junto al ábside, y una Virgen con el Niño, santa Catalina de Alejandría y san Blas, en el pilar de la derecha.
IGLESIA DE SAN ANDRÉS
Ni 50 metros separan Santa María Mayor de nuestro próximo objetivo: la iglesia de San Andrés. Se trata de un templo románico construido a partir de 1025, aunque también ha sufrido muchas modificaciones.
Merece la pena echarle un vistazo, al menos para admirar dos obras de arte.
Primero, la Capilla del Baptisterio, conocida también como primera capilla Baglioni, pues fue encargada por Grifonetto Baglioni y ornamentada con frescos de la escuela de Foligno, del siglo XV.
El segundo, un retablo de la Madonna Entronizada y Santos, que lleva la firma de Pinturicchio, del que ya hemos hablado.
PLAZA DE LA REPÚBLICA Y PALACIO COMUNAL
Seguimos avanzando siguiendo la vía principal, que es Via Camillo Benso Conte di Cavour, para llegar enseguida a la Plaza de la República, la más importante que ver en Spello.
Aquí se alza el Palacio Comunal, en cuya planta baja se ubica la oficina de turismo, donde os darán un mapa e indicaciones para visitar Spello.
El Palacio Comunal, sede del Antiguo Ayuntamiento (desde 1972 ya no lo alberga), fue edificado en piedra caliza blanca y roja en 1270, aunque también ha sido restaurado en varias ocasiones.
IGLESIA DE SAN LORENZO
Desde Plaza de la República, la calle cambia de nombre a Giuseppe Garibaldi. Enseguida llegamos a la iglesia de San Lorenzo, que queda a mano izquierda, que tiene rengo de colegiata.
Aunque la iglesia no resulta tan interesante como las anteriores, merece la pena echar un vistazo al dosel de madera existente frente al presbiterio, que recuerda al célebre baldaquino de Bernini en San Pedro de Roma. Este es obra de Ludovico Bruni Caffarilli y Carlo Lorenti.
CENTRO HISTÓRICO DE SPELLO
Más allá de visitar iglesias, como os digo, a Spello se viene a pasear por sus calles peatonales y empedradas, jalonadas de edificios universalmente construidos en piedra.
Los restaurantes, tabernas y tiendas donde se venden trufas, pasta y demás productos que la tierra ofrece por estas latitudes, se abren a casi cada paso, de manera que resulta imposible no sucumbir a la tentación.
Desde la iglesia de San Lorenzo pasamos bajo un arco que nos conducirá, vía ascendente, por Via Torre Belvedere. A cada paso, un rincón más fotogénico, para una ciudad que es pura poesía y que en ocasiones se abre a belvederes desde donde disfrutar de los alrededores de Spello, jalonados de suaves colinas.
Después de pasar frente a la pequeña iglesia de San Martino, damos un bucle completo, pasando bajo el antiguo arco romano junto a la iglesia de San Severino, y bajando nuevamente por Via Capuccini. Luego Via Giulia nos regresa a Plaza de la República.
VILLA DE LOS MOSAICOS DE SPELLO
El último lugar que ver en Spello de forma obligada es la conocida como Villa de los Mosaicos. Ya hemos dicho que la actual Spello tiene parte de su origen en la romana Hispellum. De aquella época es esta villa romana de la que se han recuperado unos 500 metros cuadrados, hoy museizados.
Aunque, desde luego, no resulta tan impresionante como la siciliana Villa Romana del Casale, esta villa de Spello conserva una decena de salas con suelos de mosaico, algunos de sellos policromados, incluyendo tanto elementos geométricos como figuras humanas y de animales.
La Villa de los Mosaicos está actualmente museizada, por lo que hay que pagar entrada.
Visitar Spello nos ocupó algo menos de cuatro horas. Y la verdad es que, junto a Gubbio, fue uno de los pequeños pueblos más bonitos que vimos durante nuestro viaje a Spello. Una población muy cercana a Perugia y de muy fácil acceso en transporte público, a la que merece la pena echar un vistazo.