El Camino de Ronda de la Costa Brava es un largo sendero costero, de casi 130 kilómetros de longitud, que une las poblaciones de Blanes (considerada como el primer pueblo de la Costa Brava por el sur) y Port Bou (al norte, llegando ya a la frontera francesa).
Entre acantilados y ascensos y descensos por los senderos marcados, el Camino de Ronda de la Costa Brava permite conocer decenas de playas y calas. Muchas de ellas, en los núcleos poblacionales más importantes. Pero otras muchas, entre pinares aislados de los pueblos. Calitas siempre de aguas cristalinas y templadas en verano, aunque no siempre con arena.
El origen del Camino de Ronda de la Costa Brava, sin embargo, nada tenía que ver con el turismo y el disfrute de la zona. Estos caminos fueron creados allá por el siglo XIX, para el control del contrabando existente.
Aunque es posible recorrer toda el Camino de Ronda en, por ejemplo, diez etapas, lo más habitual es plantear alguno de los tramos como excursión familiar, para disfrutar de aquello que la Costa Brava nos ofrece: sus agrestes paisajes costeros.
En líneas generales, el Camino de Ronda en sus distintos tramos, están habilitados para ser recorridos en familia. Más allá de que a menudo toca ascender y descender por múltiples escaleras, la dificultad no suele ir más allá de ello. Eso sí, para alguna de las etapas necesitaréis toda una jornada para completarlos.
El calzado cómodo, la protección solar y la reserva de agua, resultan obligados si queréis completar algunos de los mejores tramos del Camino de Ronda de la Costa Brava.
ALOJARSE EN UN CAMPING EN LA COSTA BRAVA
No os van a faltar alternativas en cuando a alojamiento en la Costa Brava. Reservar un camping en Costa Brava puede ser una de ellas, especialmente interesante si viajáis con niños.
Los campings más modernos suelen incluir clubes de animación infantil y deportivas, accesos a parques acuáticos y todo tipo de actividades, también para los mayores. Además, suponen un mejor contacto con la naturaleza.
CAMINO DE RONDA DE LA COSTA BRAVA, DE SANT FELIU DE GUIXOLS A S’AGARÓ
Uno de los mejores Camino de Ronda de la Costa Brava, a la vez que de los más familiares y cuidados es que nos lleva de Sant Feliu de Guixols a S’Agaro.
Vais a tardar aproximadamente una hora y media para completar los 2.5 kilómetros de este tramo del Camino de Ronda.
Normalmente este Camino de Ronda lo empezaremos en la Playa de Sant Feliu de Guixos, que se sigue de su puerto deportivo, donde podéis dejar el coche.
Pasado el puerto deportivo llegaremos a Cala Jonca, la primera de las muchas calitas que iremos viendo durante el trayecto. No os perdáis el mirador de Cala Jonca.
A lo largo del recorrido nos encontraremos con varias viviendas lujosas que tuvieron el privilegio de construirse antes de que entrara en vigor la Ley de Costas que protege el litoral español.
Enseguida nos encontramos con la Via Ferrata de la Cala del Molí, reconstruida en 2013 y que está considerada como la única del mundo que transcurre sobre el mar. Desde luego, esto no forma parte del Camino de Ronda, pero los más atrevidos, seguro que quieren disfrutar de la experiencia.
Enseguida llegamos a Cala Ametller y, bastante más adelante, Cala de n’Oliu, Cala del Peix i Cala Masset. Son varias de las pequeñas calitas donde nos podremos tumbar a tomar el sol y a disfrutar de un refrescante chapuzón. No esperéis mucha arena en estas calitas. En realidad, y haciendo honor al topónimo de Costa Brava, a menudo se trata de calas básicamente rocosas.
Hay que comentar que, en algunos tramos, el Camino de Ronda sale a la carretera, por lo que hay que ir un poco con cuidado. Luego vuelve a buscar la costa. Por ejemplo, para llegar a Sa Caleta, una pequeñísima cala de roca.
Enseguida llegamos a la Platja de Sant Pol, mucho más amplia y con todo tipo de servicio.
El último tramo nos acercará hasta s’Agaró, entre túneles, terrazas y miradores, como el de Punta d’en Pau. Y por supuesto, pasando por varias calitas, como la Cala del Barco, la Cala Pedrosa y Cala Vaques.
Finalmente, llegamos a Platja Sa Conca, mucho más amplia. Es el punto final de este Camino de Ronda de la Costa Brava entre Sant Feliu de Guixols i s’Agaró, equipada también con lavabos, duchas y hasta con un chiringuito.