Nazca, capital de la provincia homónima de Perú, es mundialmente famosa por ser el epicentro de las enigmáticas Líneas de Nazca, los curiosos geoglifos trazados en la superficie terrestre.
En este sentido, si los viajeros se acercan hasta esta ciudad, a menudo es con el único objetivo de visitar las Líneas de Nazca.
Sin embargo, más allá de subirse a una avioneta para avistar estas famosas líneas, hay suficientes lugares que ver en Nazca como para dedicarle una jornada entera.
Como os comentamos en el artículo dedicado a nuestra Ruta del viaje a Perú, nosotros llegamos a Nazca la noche anterior, visitamos la ciudad y sus alrededores durante la jornada y por la noche, tomamos el autobús nocturno en dirección a Arequipa, nuestro siguiente destino.
TABLA DE CONTENIDOS
DÓNDE DORMIR EN NAZCA
Nos vinieron a buscar a la terminal de autobuses para llevarnos hasta el hostel, que siempre se agradece.
Si disponéis de un poco más de presupuesto (para na resulta caros), dos muy buena opciones son el Hotel Alegría Nazca y el DM Hotel Nazca. Ambos disponen de piscina propia.
QUÉ VER EN NAZCA
Estos son los lugares imprescindibles que ver en Nazca y alrededores durante una jornada.
LÍNEAS DE NAZCA
Las líneas de Nazca es lo más importante que ver en Nazca. Hasta el punto que si Nazca es una parada importante durante un viaje a Perú es por la existencia de estas enigmáticas figuras geométricas que la civilización Nazca creó no se sabe exactamente cuándo, aunque muchos estudiosos cifran su antigüedad en más de 1500 años.
Voy a dedicar un post completo a las líneas de Nazca, de manera que aquí no me extenderé mucho.
Sí que os diré que, dado que las Líneas de Nazca fueron trazadas a ras de suelo y tienen unas dimensiones considerables, la única manera de visualizarlas bien es reservando un vuelo en avioneta.
Nosotros lo llevábamos reservado desde España con Civitatis, porque trabajan con los mejores operadores locales y porque puedes anular hasta el último momento, si te surge algún inconveniente.
El vuelo dura unos 30 minutos y permite contemplar una docena de figuras, entre las que destacan el colibrí, el mono, el cóndor o el astronauta.
EL CEMENTERIO DE CHAUCHILLA
El segundo lugar importante que ver en Nazca es el conocido como Cementerio de Chauchilla. Necesitaréis disponer de coche propio o de alquiler o reservar una excursión desde Nazca para llegar hasta aquí, porque el lugar se ubica a unos 35, kilómetros de Nazca. El lugar resulta realmente sobrecogedor.
El Cementerio de Chauchilla es un camposanto preincaico que probablemente habría pertenecido a la cultura Huari, que floreció en la zona entre los siglos VII y XIII.
Aunque llegaron a ser varios centenares las tumbas existentes aquí, el saqueo llevado a término a lo largo de los siglos ha dado lugar que solamente 13 hayan llegado a nuestro días.
Pero creedme que el lugar es espectacular, porque los Huari momificaban sus difuntos, que han llegado incorruptos al siglo XXI, con sus cabellos (larguísimos en el caso de la clase dirigente), sus gorros y sus ropajes.
De las 13 tumbas que podemos visitar, la mayoría incluyen a varios difuntos de la misma familia. Y en algunos casos, incluso momias de bebés.
ACUEDUCTOS DE CANTALLOC
Uno de los máximos exponentes de la ingeniería Nazca son la enorme red de acueductos que labraron a lo largo y ancho de sus territorios.
Se han podido recuperar 46, de los que 32 siguen en funcionamiento.
El acueducto de Cantalloc es uno de los mejores conservados y lo encontramos a solo 5 kilómetros del centro de Nazca.
Los acueductos de la cultura Nazca no tienen nada que ver con los acueductos romanos. Es decir, no se trata de conductos situados en altura, si no en la profundidad de la capa freática. Los Nazca laboraban unos profundos pozos en forma de espiral, hasta llegar a los acuíferos.
Una vez encontrados los acuíferos, se construían los conductos, de entre uno y dos metros de anchura, que unían los distintos pozos, situados cada pocos metros (entre 20 y 60 según el lugar). Finalmente, el agua era conducida hasta los depósitos.
Un sistema de ingeniería al que se le suponen más de 1500 años de antigüedad y que merece la pena conocer.
PLAZA DE ARMAS DE NAZCA
La plaza más importante que ver en Nazca es la Plaza de Armas. Nazca es una población pequeña, de manera que nada tiene que ver la Plaza de Armas de Nazca con la de Lima o Cuzco.
Sin embargo, es este un lugar siempre animado y con mucho ambiente. Y también es el lugar donde encontramos la iglesia más importante de la población, la sede de la municipalidad y varios restaurantes locales.
Nos recomendaron almorzar en el Restaurante Costumbres. Menú criollo, sin pretensiones, pero rico y muy bien de precio. Desde luego, éramos los únicos turistas.
LOS ALFAREROS DE NAZCA
La tradición alfarera en el valle de Nazca se remonta a muchos siglos atrás. Se sabe que tanto la cultura Nazca como la cultura Huari utilizaban la alfarería, aunque también se sabe que no conocían el torno.
De hecho, en el cementerio de Chauchilla se encontraron piezas de cerámica en casi todas las tumbas, formando parte del ajuar funerario.
Esta tradición alfarera sigue vive en Nazca de la mano de Andrés Rolando, aunque casi todo mundo lo conoce aquí como Toby. Y él está encantado de mostrarnos su taller, así como todo lo que aprendió de su padre maestro alfarero. Algo que realiza cada día con enorme entusiasmo.
Andrés Rolando se encarga de recolectar él mismo la arcilla, de crear las formas a mano sin utilizar el torno y de cocerlas en su horno construido al estilo tradicional como antiguamente.
La verdad que visitar el taller de Toby y oír sus explicaciones merece mucho la pena. Podéis reservar aquí el muy económico taller de cerámica. Os aseguro que es una actividad de lo más interesante.
Estos son los lugares imprescindibles que ver en Nazca, una ciudad que da más de sí que las famosas Líneas de Nazca.