Módena es una de las ciudades más interesantes que ver en la Emilia Romaña y que debéis incluir sí o sí en un viaje a esta región italiana.
Una ciudad, Módena, conocida en el mundo entero por su famoso aceto balsámico (o vinagre de Módena) y por su no menos célebre vino lambrusco. Y también por haber visto nacer dos personalidades de arrolladora personalidad como el cantante lírico Luciano Pavarotti y el fundador de la empresa automovilística más famosa del mundo, Enzo Ferrari.
Además, Módena está perfectamente comunicada con la capital regional, Bolonia, gracias a los muchos trenes que unen ambas ciudades en aproximadamente media hora de trayecto.
En este artículo os vamos a contar qué ver en Módena en 1 día, una ciudad a la que merece la pena dedicarle un día entero y cuyo centro monumental está incluido dentro de la lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad.
TABLA DE CONTENIDOS
CÓMO LLEGAR A MÓDENA
Como os dije, la mejor manera de llegar a Módena es hacerlo en tren. Módena se localiza a media hora de tren de Bolonia y a media hora de tren de Parma (queda justo en medio). Desde la estación de Módena al centro histórico, no tenéis más que quince minutos de paseo.
Desde luego, también podéis llegar en Módena en coche propio o de alquiles. La ciudad está perfectamente conectada con el resto de la Emilia Romaña y de Italia.
MAPA CON LOS LUGARES IMPRESCINDIBLES QUE VER EN MÓDENA
Estas son los lugares que no os podéis perder al visitar Módena:
- Catedral de Módena
- Torre Ghirlandina
- Palacio Comunale
- Acetaia Comunale
- Mercado Albinelli
- Sinagoga de Módena
- Palacio Ducal
- Museo Enzo Ferrari
QUÉ VER EN MÓDENA. LAS VISITAS IMPRESCINDIBLES.
CATEDRAL DE MÓDENA
Cualquier visita a los lugares imprescindibles que ver en Módena debería empezar por su catedral, que está considerada como una de las más importantes construcciones románicas de Italia.
La Catedral de Módena se empezó a construir a finales del siglo XI sobre el sepulcro de Geminiano de Módena, obispo de la ciudad en el siglo IV. El sepulcro de este santo, que es también el patrón de la ciudad, puede admirarse en la cripta de la Catedral.
En la fachada occidental hay que fijarse en los relieves existentes, que son obra del maestro Wiligelmo de Módena y están considerados entre las mejores esculturas románicas de Italia. En la portalada principal destaca la existencia de un pórtico sostenido por sendas columnas sobre leones. Este tipo de portalada se repite en la cara norte y especialmente en la sur, donde encontramos dos portaladas de este tipo, siendo la Porta Regia, la más impresionante.
El interior nos muestra un templo de tres naves. A destacar el púlpito, bellísimo, la existencia de la cripta, que es casi una iglesia en sí misma sostenida por columnas, y el presbiterio, que queda en una situación elevada en relación al resto de la iglesia.
TORRE GHIRLANDINA
La Torre Ghirlandina es el campanario de la Catedral de Módena. Es uno de los más bellos de Italia. Se alzó casi un siglo más tarde que la catedral (a partir de 1179) manteniendo el estilo románico del Duomo, aunque el remate cónico ya nos introduce en el gótico.
Según parece, el nombre de Ghirlandina le fue dada a la torre por parte de los judíos exiliados de Sevilla. Al parecer, la torre les recordaba la Giralda sevillana.
Merece la pena saber que es posible subir a la Torre Ghirlandina y que, además, merece mucho la pena. Desde lo alto de sus más de ochenta metros de altura, las vistas de todo el núcleo histórico de Módena son excepcionales.
PALACIO COMUNAL
El Palacio Comunal de Módena, situado en la Plaza Grande frente a la Catedral, es otro de los edificios más importantes que ver en la ciudad. Su fachada, con el largo pórtico y la torre del reloj central, es una de las estampas más reconocibles de Módena.
Merece la pena saber que es posible visitar las salas históricas del Palacio Comunal, que son apenas cinco o seis y se visitan en unos pocos minutos. Allí encontramos el famoso cubo secuestrado que los modeneses se llevaron como botín de guerra en la batalla que les enfrentó a los boloñeses en 1325. Eran tiempos de güelfos y gibelinos, cuando unos apoyaban al Sacro Imperio Romano Germánico y los otros al Pontificado.
Entre las salas más interesantes, destaca la Sala del Fuoco, ornamentada con pinturas del siglo XVI, la Sala del Vecchio Consiglio, con un esplendoroso y palaciego techo y la Sala de los Arazzi, decorada con pinturas sobre lienzos, a modo de tapices.
ACETAIA COMUNAL
En el mismo ático del Palacio Comunal, encontramos otro de los lugares que hay que ver en Módena, a no ser que hayáis visitado otra acetaia en la ciudad.
Una acetaia es el lugar donde se elabora el famoso aceto balsámico de Módena en su forma tradicional. Las visitas son guiadas y tienen una duración aproximada de una hora. Hay que reservarlas con antelación y os aseguro que merecen la pena. Eso sí, las visitas son en italiano, de manera que no está de más tener unas nociones del idioma. Si no, os tocará ponerle un poco de imaginación a la explicación, que seguro que tampoco resulta complicado.
El Aceto Balsámico Tradicional de Módena poco tiene que ver con el industrial que se vende en los supermercados. Para disponer de la Denominación de Origen protegida tiene que envejecer un mínimo de 12 años en barrica. Un tiempo en que el mosto especiado va pasando de barrica en barrica, en lo que es conocido como una batería, que siempre debe situarse bajo la techumbre. Algunas tienen hasta 12 o más barricas, pero el mínimo es que la batería disponga de cinco barricas de tamaño descendiente.
En Módena podréis encontrar varios show-room de casas de Aceto Balsámico, pero la verdad es que visitar la Acetaia Comunal (o cualquier otra acetaia que organice visitas guiadas) resulta de lo más interesante.
MERCADO ALBINELLI
Si tomáis Via Luigi Albinelli desde Piazza Grande (donde está la Catedral) en dos minutos llegáis al mercado más importante que ver en Módena. Es el mercado Albinelli.
Aunque el mejor momento para visitar los mercados suele ser a primera hora, en el caso del Mercado Albinelli no es mala idea visitarlo al medio día y aprovechar uno de los lugares que ofrecen comida, para disfrutar de los platos locales.
En este mercado encontraremos todos los manjares típicos de la región de la Emilia Romaña, incluido el queso parmesano, el prosciuto de Parma, la mortadela de Bolonia o el Culatello di Zibello, todo tipo de pasta fresca (los tortellini y los tortelloni son los reyes). Tampoco faltan el ya mencionado Aceto Balsámico de Módena y el Lambrusco, el vino más famoso de la región y que dispone de cuatro Denominaciones de Origen distintas.
SINAGOGA DE MODENA
También a menos de cinco minutos a pie de la Catedral, en la Plaza Giuseppe Mazzini, encontramos uno de los templos más curiosos que ver en Módena. Me refiero a la Sinagoga.
Fue construida en 1873 por la comunidad israelítica de Módena en estilo lombardo y la verdad es que llama la atención por su tamaño. Sim ser, desde luego, la Sinagoga de Budapest, seguro que se trata de una de los mayores templos israelíticos de Italia.
Por desgracia, no podemos visitar el interior de la sinagoga porque permanece cerrada. Al menos, en sábado, que es el día sagrado para los judíos y que coincide con nuestra visita a la ciudad. Según la página web de la sinagoga, las visitas guiadas se realizan de lunes a jueves de 09.00 a 12.00.
PALACIO DUCAL DE MÓDENA
Dejamos ahora el centro histórico de Módena, declarado Patrimonio de la Humanidad, para dirigirnos al Palacio Ducal de Módena.
Se trata de un enorme edificio que era la sede de la corte de los Este, la familia de origen lombardo que ostentó el Ducado de Módena entre 1288 y 1860.
No tenemos tiempo de visitar el interior del Palacio Ducal, que de momento solo se visita los fines de semana en recorridos guiados, previamente reservados.
El edificio fue construido en 1634. En su momento, el palacio quedaba fuera del centro histórico, aunque en realidad no hemos tardado ni diez minutos en llegar al mismo desde Piazza Grande.
Frente al Palacio, una estatua nos recuerda a Ciro Menotti, el patriota que organizó la insurrección liberal de Módena, en 1831. El propio Duque de Módena se encargó se firmar su sentencia de muerte.
MUSEO ENZO FERRARI
No queríamos dejar la ciudad sin visitar el museo más importante que ver en Módena, el Museo Enzo Ferrari (las entradas se comprar por anticipado aquí). Y sin que sirva de precedente en Italia, no se trata de un museo de arte, si no de un museo de coches.
Enzo Ferrari, el empresario que ideo la más famosa marca automovilística de la historia, era natural de Módena. Aunque la fábrica Ferrari tiene su sede actual en Maranello, en Módena podemos visitar el Museo Enzo Ferrari que rinde merecido homenaje al personaje y su sueño.
No faltan en este Museo Ferrari de Módena un buen número de coches, que es al fin y al cabo lo que uno viene a ver aquí. Tanto automóviles deportivos, como monoplazas de Fórmula 1.
Eso sí, la parte más emotiva se la lleva un audiovisual que se muestra cada hora en formato gran pantalla y que nos recuerda la dimensión humana y la visión empresarial de Enzo Ferrari. Visita imprescindible de Módena si os gusta todo el tema automovilístico.
Así termina nuestra visita a los lugares imprescindibles que ver en Módena, una ciudad que merece mucho la pena que incluyáis durante un viaje a la Emilia Romaña.