La Costa Brava es uno de los destinos más apetecibles de Catalunya. Durante todo el año, pero especialmente en verano, que es el momento donde más se puede disfrutar de aquello a lo que su nombre alude: su costa.
En este artículo os hablaremos de 5 de nuestras playas favoritas de la Costa Brava, aunque se trata únicamente de una pequeña muestra de ellas. Si realizáis parte del sendero costero que une todos los pueblos de la Costa Brava, (el Camí de Ronda) encontraréis decenas de preciosas calitas, a menudo solitarias.
Más aún, si tenéis la oportunidad de alquilar una embarcación, seguro que podréis atracar en algunas calas donde quizá aquel día solo habréis llegado vosotros.
5 PLAYAS Y CALAS DE LA COSTA BRAVA DONDE PERDERSE
PLATJA DES CODOLAR, TOSSA DE MAR
Aunque la playa más popular y conocida de Tossa de Mar es la Platja Gran (la Playa Grande), nuestra favorita es la Platja de Es Codolar, que queda por detrás de la ciudad amurallada y es mucho más pequeña.
La única pega de esta pequeña calita de aguas transparentes es que se trata de una playa de guijarros y no de finas arenas. Sin embargo, bañarse aquí nos parece algo mágico.
CALA POLA, ENTRE TOSSA DE MAR Y SANT FELIU DE GUÍXOLS
Aunque pertenece al término municipal de Tossa de Mar, la Cala Pola se localiza unos cinco kilómetros al norte del centro urbano. Podéis llegar a ella a través del Camino de Ronda que parte la Platja de la Mar Menuda de Tossa (al norte del núcleo urbano) en unos cuarenta minutos de paseo.
Un buen momento para visitarla es por la tarde, cuando marchen los turistas que hayas ido a pasar parte del día. Encajonada entre pinedos, el típico paisaje mediterráneo, es una de nuestras playas favoritas en la Costa Brava.
CALA S’ALGUER, PALAMÓS
Esta pequeña playita de poco más de cincuenta metros de longitud se ubica unos pocos minutos al norte del núcleo urbano de Palamós, otro de los pueblos más bonitos de la Costa Brava.
Podéis llegar a ella a través del Camino de Ronda en un corto paseo. Aquí encontraréis un conjunto de casitas de pescadores pintadas de colores, algunas centenarias, que es lo que realmente convierte esta calita en un lugar especial.
Palamós, como Begur, es una de las poblaciones con más calitas y playa de la Costa Brava. Cala Estreta, Cala Corbs o Cala Margarita son solo algunos ejemplos. Alquilar un barco en Palamós es una muy buena opción para llegar, a vuestro ritmo y sin ataduras, a estos lugares recónditos que con el coche no resulta nada fácil llegar y que, a menudo, desde el Camino de Ronda solo se pueden ver desde las alturas.
PLATJA DE PORT BO, CALELLA DE PALAFRUGELL
Regresamos ahora a lo que son las playas urbanas, para hablar de la preciosa Playa Port Bo, también conocida como de Les Barques (por las barquitas de pescadores que suel haber en la arena) o incluso de Les Voltes (por el edificio que queda justo en esta playa, formado por arcos blancos).
El lugar, justo enfrente de uno de los paisajes urbanos más bellos de Mediterráneo y más icónicos que ver en la Costa Brava, es casi idílico. Disfrutar de un buen arroz caldoso después de disfrutar de un día de playa en Calella resulta un plan estupendo.
PLATJA DE LA RIBERA, PORT DE LA SELVA.
Situada justo en el centro urbano de Port de la Selva, desde esta playa de más tres cientos metros de longitud se disfruta de otro de estos paisajes urbanos que los pintores vienen inmortalizando desde hace dos siglos, con las casitas encaladas y la iglesia de El Port de la Selva sobresaliendo por encima de los tejados.
Esta playa solo tiene una pega. Se trata de una de las playas más frías de Catalunya. Al menos para nuestro gusto.
Estas son solo algunas de nuestras playas y calas favoritas de la Costa Brava, pero verdaderamente las hay a decenas: Cala Sa Tuna y Cala Aiguablava de Begur, Cala Rustella de Roses, la Playa de Tamariu en Palafrugell. La verdad es que con razón, la Costa Brava atrae año tras año a miles de turistas.