Hoy os hablaremos de 4 espacios naturales de las Islas Canarias. Y concretamente de 4 rutas de senderismo familiares que pueden realizarse en las popularmente conocidas como Islas Afortunadas.
Más allá de sus playas y sus pueblos con encanto, el verdadero encanto de las Islas Canarias reside en sus espacios naturales. Volcanes, no todos extintos, paradisíacas playas a menudo desérticas o barrancos que nos transportan a los países del norte de África son algunos de los paisajes más habituales de las Islas Canarias.
Estos 4 trekkings que os vamos a proponer son todos de bastante fáciles de completar. Algunos de ellos, incluso, los hemos realizado porteando a Iris.
4 TREKKING FAMILIARES EN LAS ISLAS CANARIAS
BARRANCO DE LAS PEÑITAS, EN FUERTEVENTURA
El Barranco y Arco de las Peñitas es uno de los espacios naturales que más nos gustaron al viajar a Fuerteventura.
Aunque la mayoría de turistas que viajar a Fuerteventura lo hacen atraídos por sus playas y los deportes acuáticos (como el kitesurf), lo cierto es que en esta isla también se puede disfrutar de algunos trekking familiares de lo más entretenidos.
El Barranco de las Peñitas es un precioso paisaje de interior. Un recorrido encajonado dentro de una garganta que sigue a un casi seco riachuelo, enmarcado por enormes roquedales y escénicas palmeras. Por un momento, parece que nos hayamos transportado al Magreb.
Entre la población de Vega de la Peña y el enclave conocido como Buen Paso, el recorrido no son más de 2 kilómetros de longitud, bastante fácil, en un sendero bien marcado. Desde aquí, se puede acceder hasta el Arco de las Peñitas, otro lugar de enorme belleza.
Para acceder al Arco de las Peñitas, el sendero ya no resulta tan fácil, pues hay que trepar una tachuela. Son apenas unos centenares de metros, pero probablemente no sea apto para menores de 7 u 8 años.
Eso sí, la recompensa no es poca. Finalmente llegamos al Arco de las Peñitas, un arco natural que el paso del tiempo se ha encargado de esculpir en piedra y que parece transportarnos a los paisajes del Oeste Americano.
BARRANCO DE MASCA, TENERIFE
Los espacios naturales se multiplican en la Isla de Tenerife, la mayor de las Canarias. Sin embargo, más allá de lugares tan visitados como el Parque Nacional del Teide o los Acantilados de los Gigantes, hay otros espacios mucho menos conocidos.
Uno de ellos es el Caserío de Masca, en el municipio de Buenavista del Norte. Situada en el noroeste de Tenerife, Masca se enclava en las montañas del Parque Rural de Teno. Se trata de un espacio eminentemente rural que merece mucho la pena.
El Parque Rural de Teno es un espacio de enorme valor paisajístico, pero también ecológico y cultural, con acantilados y zonas boscosas, en un marco que comparte con muestras de la arquitectura tradicional canaria.
La ruta que os proponemos es la del Barranco de Masca, que desciende desde el caserío de Masca hasta la playa. Son unas dos horas y media necesarias para completar unos 5 kilómetros de descenso.
Desde la playa, podéis regresar por donde habéis venido (en esta ocasión, en ascenso) o regresar en bote. Eso sí, debéis cercioraros que el embarcadero está operativo.
La parte más emocionante del descenso por el Barranco de Masca es la que transcurre entre gargantas formadas por muros pétreos cercanos a los 400 metros de altura. Hay que tener en cuenta que aunque la entrada al Barranco de Masca es libre, hay que reservar plaza.
EL ROQUE NUBLO, EN GRAN CANARIA
Otro de los mejores trekking en las Canarias es el que nos permite acceder a la base del que es uno de los emblemas de la isla de Gran Canaria: el Roque Nublo.
Se trata de una enorme roca monolítica de unos 80 metros de altura, situada en lo alto de la Caldera de Tejeda, el cráter del extinto volcán localizado en el centro de la isla, a 1813 metros sobre el nivel del mar.
El acceso hasta la base del Roque Nublo no presenta complicación alguna. Debéis dejar el coche en la Degollada de la Goleta (hay un aparcamiento). Desde aquí, un sendero entre pinares y bien indicado nos acerca hasta la base de este monumento natural que es el Roque Nublo.
En este punto, no solo se disfruta del enorme monolito. Las vistas de la Caldera de Tejada resultan una maravilla. E incluso a los lejos, se puede avistar perfectamente el pico del Teide, otro de los iconos de las Islas Canarias.
TREKKING A LA CALDERA BLANCA, EN LANZAROTE
Aunque el Parque Nacional Timanfaya es el espacio natural más importante que ver en Lanzarote, la imposibilidad de realizar un trekking en este lugar (las visitas se realizan a bordo de guaguas), nos llevó a buscar alternativas.
Una de las rutas senderistas familiares más fáciles de completar y más entretenida es el conocido como Trekking a la Caldera Blanca.
El recorrido parte de Mancha Blanca, donde puede dejarse el vehículo. Allí empieza un recorrido de unas tres horas de duración que nos llevará a conocer dos cráteres volcánicos: la Caldereta y la Caldera Blanca.
El recorrido no es nada difícil. De hecho, lo completamos en unas tres horas y haciendo porte o con Iris. Eso sí, después de pasar una parte de malpaís, prácticamente, llana, en el último tramo hay que ascender hasta el borde de la Caldera Blanca. Es un desnivel de unos 250 metros que se salva en dos kilómetros y medio.
Nuevamente, las vistas son una maravilla. Y no solo del cráter de la Caldera Blanca, si no también del área que circunda este volcán, con el Parque Nacional Timanfaya a lo lejos.
Fotografia CC del Barranco de Masca: By Aliasnamesake – Own work, CC BY-SA 4.0