Visitar Artenara es algo que no debería faltar en un viaje a Gran Canaria. Cierto que se trata de una población algo alejada de los centros turísticos de la isla y que para llegar a Artenara hay que sufrir una carretera donde las curvas continuas son la norma, pero la verdad es que el conocido como pueblo de las casas-cueva de Gran Canaria es una auténtica maravilla, tanto a nivel paisajístico como etnológico.
En este post te vamos a contar qué ver en Artenara, cómo llegar hasta aquí e incluso, dónde dormir en Artenara (en algunas de las casas-cueva de este pueblecito).
Para empezar diré que Artenara se localiza al borde de la Caldera de Tejeda (el enorme cráter volcánico que domina el centro de Gran Canaria). Se trata del municipio situado a más altura de toda la isla (a 1230 metros sobre el nivel del mar) y del menos poblado (poco más de 1000 lugareños repartidos en sus 7 núcleos poblacionales).
Curiosamente, la extensión del municipio es enorme, comprendiendo casi 67 kilómetros cuadrados que incluyen desde montañas que superan los 1700 metros de altitud hasta una pequeña salida al mar. Sin embargo, todo lo que explicaré en este post acerca de los lugares que ver en Artenara hace referencia a su núcleo principal.
CÓMO LLEGAR A ARTENARA
Para visitar Artenara deberéis sufrir una carretera repleta de curvas, pero también con un enorme interés paisajístico, entre brumas, bosques de pinares, cascadas cayendo de las laderas y musgos colonizando parte de un paisaje que por momentos nos recordó los bosques nubosos de Costa Rica.
Nosotros llegamos desde el noreste, desde Teror, a través de la carretera GC-21. Durante el recorrido me detuve en varias ocasiones para tomar fotos. La verdad es que el paisaje es sobrecogedor.
Si venís del sud (Maspalomas) deberéis tomar la GC-60 que pasa por San Bartolomé de Tirajana (y en el último tramo la GC-210). También podéis llegar desde el norteoeste (Gáldar) tomando varias carreteras secundarias, pero bien asfaltadas.
DORMIR EN ARTENARA
La verdad es que nosotros no hicimos noche en Artemara. Sin embargo, si vuestro viaje a Gran Canaria va a ser de más de 5 o 6 días, puede ser una muy buena idea, ya que desde Artenara se pueden hacer multitud de excursiones, incluyendo toda la Caldera de Tejeda, la Mesa de Acusa o el poblado troglodita de Acusa Seca (pertenece a Artenara), que no tuvimos tiempo de conocer al no hospedarnos en la zona.
Una muy buena manera es hospedarse en una de las Casas-Cueva de Artenara. Muy recomendadas son:
CASA CUEVA EL MIMO. Una maravilla de casa cueva, sin encalar, que incluye una piscina exterior espectacular.
QUÉ VER EN ARTENARA
Ya hemos dicho que Artenara es el pueblo de las casas-cueva de Gran Canaria. Esto es debido a que desde hace muchísimas décadas, los habitantes de este pueblo vienen viviendo en cuevas artificiales excavadas en la misma ladera de la montaña, que han ido adaptando como vivienda.
De esta manera, estas casas-cuevas contienen una zona interior excavada, que suele comprender las habitaciones y la sala de estar y una zona exterior construida, a modo de fachada y recibidor.
Solo llegar a Artenara nos dimos cuenta de la existencia de decenas de estas casas-cueva y de que, efectivamente, siguen siendo el lugar donde viven buena parte de los artenarenses.
Vivir en cuevas es algo que, en realidad, vienen haciendo los grancanarios desde incluso antes de la llegada de los españoles. Artenara se localiza en pleno Paisaje Cultural de Risco Caído y las Montañas Sagradas de Gran Canaria, que la Unesco incluyó en la lista del Patrimonio Mundial. Una de las características de este paisaje son la miríada de yacimientos arqueológicos pertenecientes a los aborígenes canarios que nos recuerdan que desde hace ya muchos siglos, éstos vienen viviendo en cuevas excavadas en la montaña. Algunas de ellas se pueden visitar, aunque la mayoría de ellas, no.
EL MUSEO DE LAS CASAS CUEVAS
Para saber cómo son estas casas-cueva, nos dirigimos a uno de los lugares más interesantes que ver en Artenara: el museo de las Casas-Cuevas.
Este museo se localiza en lo que eran tres casas-cuevas reales, que en la actualidad han sido adaptadas para las visitas turísticas. Se trata de un lugar encantador, que nos permite entender cómo viven los artenarenses en estas curiosas viviendas excavadas, con sus salones, sus habitaciones, comedores, baños o cocinas, pero también algunos de los trabajos artesanales que han venido desempeñando a lo largo de los últimos siglos.
Una auténtica maravilla y, además, gratuito.
LA CAPILLA DE LA VIRGEN DE LA CUEVITA
Otro lugar que hay que ver en Artenara es la pequeña ermita o capilla de la Virgen. Como no podría ser de otra forma, esta ermita está excavada también en la misma roca. Dentro de la cuevita, como la conocen aquí, encontramos labrados en la misma piedra su propio altar, el púlpito, el atril y hasta un confesionario.
Un lugar recogido que no os podéis perder.
IGLESIA DE SAN MATÍAS
Entre los lugares que ver en Artenara no encontraréis grandes monumentos. Es esta, más bien, una población donde disfrutar de sus miradores y sus cuevas-casa excavadas en las laderas. Sin embargo, sí que quiero hacer referencia a la iglesia de San Matías, que se alzada en la plaza homónima, donde además encontramos el ayuntamiento de Artenara.
Se trata de una iglesia de tres naves alzada en 1870, que vino a sustituir un templo anterior. En la fachada destacan las dos torres unidas por el cuerpo central. Y, en el interior, tres naves separadas por columnas y arcos, llamando la atención que éstas se cierren mediante un bonito artesonado neomudéjar.
El mural del presbiterio, que representa la Ascensión de Jesús, llama la atención por su belleza y por sus dimensiones.
EL MIRADOR DEL UNAMUNO.
Entre los lugares que hay que visitar en Artenara no pueden faltar varios miradores. Algunos los encontramos paseando por el mismo núcleo urbano. Para llegar a otros, tenemos que andar unos pocos minutos.
Uno de los más bonitos es el Mirador de Unamuno, un estupendo balcón que mira directamente a la Caldera de Tejeda. Enfrente, el majestuoso Roque Bentayga nos mira desde la otra vertiente de la caldera.
Una estatua de Unamuno disfrutando como nosotros del paisaje nos recuerda el paso del escritor vasco por estas tierras, como exiliado. Lástima que, a media mañana, tengamos el sol de cara.
MIRADOR DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS
Si en Río de Janeiro tienen su Cristo Redentor, en Artenara no le van a la zaga. Y la verdad es que el Sagrado Corazón de Jesús de esta población no es precisamente pequeño. Es una obra de 1996, del escultor de Arucas José Luis Marrero y tiene una altura de cinco metros.
Según leímos, el Sagrado Corazón de Jesús fue encargado por el cura párroco de Artenara, Domingo Báez González, que quiso invertir un premio de la Lotería Primitiva en esta gran escultura. Desde luego, la imagen del Sagrado Corazón no deja indiferente y el mirador, a 1257 metros sobre el nivel del mar, tampoco.
CENTRO DE INTERPRETACIÓN DE RISCO CAÍDO Y LAS MONTAÑAS SAGRADAS
Si os gusta la arqueología y la historia, otro lugar que ver en Artenara de forma obligada es el Centro de Interpretación de Risco Caído y las Montañas Sagradas, que da cobertura al enorme Paisaje Cultural que fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 2019.
Ya que el Yacimiento de Risco Caído no se puede visitar libremente (en realidad, solo se realizan unas pocas visitas guiadas que en tiempos del Covid han quedado suspendidas), merece la pena conocer este centro donde se ha reproducido una de las cuevas más destacadas del complejo troglodita. Se trata de una Cueva Número 6, en la que se excavó una cúpula casi perfecta e incluso una ventana que permite la entrada de luz durante unos meses al año, lo que convierte la existencia del haz lumínico que provoca en un curioso calendario solar. Además de las típicas cazoletas del piso, en esta cueva encontramos los tan habituales triángulos públicos que las culturas aborígenes canarias labraron en muchas de las cuevas que habitaron.
La verdad es que visitar Artenara supuso uno de los momentos más interesantes de nuestro viaje a Gran Canaria. Y, además, lo pudimos compaginar con la visita a los Roques Nublo y Bentayga, que quedan muy cerca.
Comentarios:
6 comentarios en “Qué ver en Artenara, el pueblo de las casas-cueva de Gran Canaria.”
Espectacular. Recuerda las casas-cueva de Guadix, pero las vistas aquí son extraordinarias. Me lo apunto.
Así es. Muy semejantes. Además, damos fe, porque las hemos visitado este mismo año.
Pues tiene muy buena pinta esto de dormir en una casa-cueva de Artenara. Estamos pensando en visitar Gran Canaria es septiembre y veo que Artenara no puede faltar! ¿Te pareció complicado el camino hasta allí?
Hola, Josep. Complicado para nada. Eso sí, tendréis que superar un puerto con curvas. Pero con el asfalto en buen estado. Te encantará visitar Artenara. Muy recomendable!
Gracias por el artículo; vamos a visitar Gran Canaria en septiembre y nos viene de maravilla.
Crees que se puede visitar Gáldar y Artenara en el mismo día?
Hola, Almudena. Desde luego que sí. Ambos lugares son relativamente pequeños, de manera que se pueden visitar el mismo día. Si dispones de tiempo, una muy buena iedea es alojarte en Artenara para disfrutar de otros lugares de la Caldera de Tejada al día siguiente.
Un abrazo!