En este artículo os vamos a hablar acerca de 5 de los lugares mágicos que ver en Grecia, uno de los países más interesantes de Europa, particularmente si estáis interesados en la historia y la arqueología.
ATENAS Y LA ACRÓPOLIS
Casi todos los viajes a Grecia tienen Atenas como puerta de entrada. No es de extrañar, pues se trata de la capital del país y su aeropuerto está conectado con la mayoría de capitales europeas.
Atenas es una ciudad maravillosa a la que debéis dedicar un mínimo de tres jornadas. En esta ciudad, no solo disfrutaréis de la arqueología sino también de muchos barrios con encanto, como Plaka o Monastiraki.
Sin embargo, el lugar más mágico que ver en Atenas es, no podría ser de otra forma, la Acrópolis. Entrando por la maravillosa puerta de los propileos, antigua entrada a la Acrópolis, vais a poder conocer algunos de los templos más importantes de la Antigua Grecia, incluidos en Partenón, el famoso templo alzado en época de Perícles, íntegramente diseñado en mármol blanco y diseñado por Fidias. El templo estaba dedicado a Atenea Parthenos.
También en colina de la Acrópolis vais a conocer otros lugares excepcionales como el Erecteion, construido entre el 420 y el 406 AC, famoso por sus columnas formadas por cariátides, el Odeón de Herodes Ático y el Teatro de Dionisio.
MIKONOS
Es una de las islas más famosas que debes visitar en Grecia y no es casualidad. La podéis visitar por libre o de la mano de un crucero a las islas griegas.
Su capital es Chora, una población encantadora de viviendas e iglesias encaladas. La Pequeña Venecia, un rincón de lo más encantador con sus célebres molinos, es quizá el lugar más fotografiado de la isla. No os perdáis tampoco la Paraportiani, un complejo formado por 5 iglesias asimétricas.
Además de disfrutar de sus playas, no estará nada mal buscar tiempo para conocer la isla de Delos, que se ubica enfrente de Mikonos, que es donde la leyenda cuenta que Apolo y Artemisa nacieron. Aquí encontraréis restos del antiguo teatro griego, así como la famosa terraza de los leones.
SANTORINI.
Es verdad es que Mikonos y Santorini son las islas más trilladas de Grecia. Si encontráis un crucero en oferta a las islas griegas, casi seguro incluye ambas escalas. Pero no es casualidad. Son dos de las más bellas islas del Egeo y, además, su acceso resulta muy fácil, tanto a bordo de un crucero, como por libre.
Fira, su capital, situada en lo alto del acantilado formado por el borde del viejo cráter colapsado que es la isla de Santorini es su ciudad importante. Una vez más, callejones estrechos, casas encaladas y cúpulas azules en lo alto del acantilado, que nos recuerdan la importancia de la religión dentro de la cultura griega.
Sin embargo, nuestra población preferida en la isla de Santorini es Oía, situada en el otro extremo de la isla. También crecida en lo alto del acantilado, es famosa por sus maravillosas puestas de sol. Más allá de ello, esta bella población también merece ser callejeada con esmero, sin prisa.
METEORA
Más allá de sus islas, sus playas y sus monumentos arqueológicos, si hay un lugar mágico que debes visitar en Atenas, este es Meteora, en la llanura de Tesalia, donde más de una docena de monasterios fueron construidos en lo alto de unos escarpados montículos que en momentos recuerdan la Montaña de Montserrat en Catalunya. Hoy en día han quedado solamente seis de aquellos Monasterios de Meteora, pero os aseguro que su visita no os dejará indiferente. Algunos disponen de varias de las más bellas pinturas al fresco elaboradas jamás dentro de iglesias bizantinas.
PELOPONESO
Por último os voy a hablar del Peloponeso. Deberéis dedicar al menos tres días a visitar el Peloponeso, una extensa península que contiene algunos de los más grandes tesoros de Grecia. Varios de ellos están incluidos dentro de la lista del Patrimonio de la Humanidad.
Entre los lugares imprescindibles del Peloponeso, no os debéis perder Olimpia, el antiguo santuario que fue la sede de los Juegos Olímpicos de la antigüedad o Epidauro, una ciudad que dispone de uno de los mayores teatros griegos jamás construidos.
No menos interesante resulta Micenas, cuna de la cultura micénica. Aquí podréis visitar las enormes tumbas en forma de túmulo, donde fueron sepultados los reyes y dignatarios micénicos. La más famosa de todas ellas es la conocida como tumba de Agamenon.