Las fronteras de la Unión Europea se han vuelto a abrir para viajeros procedentes de los estados miembros. Tras meses de confinamiento, todos merecemos unas vacaciones, pero es normal que aún nos asuste un poco. Sin embargo, si viajamos con mascarilla, manteniendo la distancia de seguridad y lavándonos las manos con frecuencia, podemos viajar este verano. Consulta nuestras recomendaciones o visita el Open Travel Index de Omio, con información actualizada de restricciones de viaje y aperturas de fronteras.
Islas Canarias
Las ocho islas del archipiélago canario han estado trabajando duro para ofrecer una experiencia segura y sin riesgos de contagio. Se respetan todas las medidas de seguridad y la población usa mascarillas en casi todo momento. Además, en sus playas se respeta las medidas de seguridad, favorecidas este año por la menor afluencia de turistas extranjeros.
Canarias, con sus kilómetros de playas y sus montañas, son ideales para relajarse al aire libre y tomar el sol o hacer senderismo sin preocupaciones.
Nosotros hemos tenido la oportunidad de visitar Tenerife y Gran Canaria y ambas nos han encantado. En la primera, no debéis dejar de subir al Teide, la montaña más alta de España, o visitar la preciosa ciudad colonial de San Cristóbal de la Laguna.
Otras visitas imprescindibles que ver en Tenerife son los descollantes paisajes del Valle de Anaga y varios de los encantadores enclaves del norte de la isla, incluyendo Icod de los Vinos, Garachico o el Puerto de la Cruz.
Islas Baleares
Otro destino considerado como seguro durante este verano tan especial son las Islas Baleares. La condición insular de estos territorios ha permitido que la incidencia de contagiados sea especialmente baja.
Mallorca, Ibiza y Menorca son las islas más visitadas. Un recorrido por la isla de Mallorca suele empezar con una visita a Palma de Mallorca, su capital, una ciudad histórica, con más de mil años a sus espaldas y que contiene muchos monumentos de interés, incluidos su preciosa catedral gótica, los baños árabes o monumental Palacio de la Almudaina.
Sin embargo, Mallorca es mucho más que su capital. Visitar las Cuevas del Drach o hacer una Ruta por la Sierra de Tramuntana, con sus preciosos y encantadores pueblos como Valldemossa y Pollensa, forman parte de las visitas más habituales en la isla.
En Menorca, más allá de perderse por sus calas y disfrutar de Ciutadella, su ciudad más importante, merece la pena realizar un recorrido por la Ruta Talayótica. Con decenas de maravillosos yacimientos arqueológicos, incluida la famosa Naveta des Toduns, se trata de una de las mejores rutas arqueológicas que se pueden realizar en el sur de Europa.
Oporto
El país vecino tardó un poco más en abrir sus fronteras con España, pero desde el 1 de julio ya se puede cruzar a Portugal sin problemas. Además, Portugal ha sido el país del sur de Europa menos afectado durante la epidemia.
Oporto siempre es una opción excelente para pasar unos días. Es una ciudad relativamente pequeña, así que no encontraréis grandes masas de gente como en otras zonas más turísticas, y siempre puedes callejear y sentarte en terrazas. Estar al aire libre es mucho más seguro a la hora de progeterse de la COVID-19, y en Oporto tienes un poco de todo: paseos junto al río, cenas acompañadas con vinho verde en la terraza de un restaurante, baños en las impresionantes piscinas naturales de Leça o un picnic en el Parque da Cidade.
Entre los lugares que ver en Oporto de forma obligada destaca la Catedral, el Barrio de Ribera a los pies del río Duero, el Puente de Don Luís, emblema de la ciudad, o la barroca Torre de los Clérigos, desde donde disfrutaréis de unas maravillosas vistas de Oporto.
Visitar las bodegas de Oporto es otra de las cosas que nadie debe perderse en esta ciudad.