La Iglesia de Santa María de Melque es uno de los monumentos más interesantes que se pueden visitar en la provincia de Toledo. Esta considera como uno de los mejores ejemplos de arte visigodo que ha llegado a nuestros días.
En mi último viaje por Castilla la Mancha, después de realizar la Ruta del Quijote y de visitar Toledo por dos días, me lancé a descubrir alguno de los lugares de interés en la provincia de Toledo. Ello me llevó hasta Santa María de Melque, pero también hasta las cercanas y preciosas Barrancas de Burujón o hasta el Parque Arqueológico de Carranque.
Esta imagen es de Google Maps
SANTA MARÍA DE MELQUE, JOYA DEL ARTE VISIGODO ESPAÑOL, EN LA HISTORIA.
Santa María de Melque está considerada como una joya del arte visigodo español. O, mejor dicho, del arte hispanovisigodo. Su visita se enmarca dentro de las Rutas Visigodas de la Provincia de Toledo, que permite conocer otros enclaves como el conjunto monacal de San Pedro de la Mata, los cimientos del complejo residencia de los Hitos en Orgaz o el sitio de Guarrazar, donde en su momento se descubrió el valiosísimo tesoro de Guarrazar (o de Guadamur) que se puede visitar en el Museo Arqueológico Nacional, uno de los mejores museos de Madrid.
Santa María de Melque era la iglesia de un conjunto monástico que se ubicaba en tierras toledanas, que por aquel entonces era la capital del reino visigodo. Tras la conquista islámica, el culto se perdió y el lugar se convirtió en una suerte de fortaleza. Sin embargo, tras la Reconquista en tiempos del Rey Alfonso, Santa María de Melque recuperó sus funciones como centro cristiano, en este caso, formando parte de la Orden del Temple.
A punto estuvo Santa María de Melque de pasar a dormir, por siempre más, el sueño de los justos. Fue a partir del siglos XVIII cuando el espacio quedó progresivamente abandonado para convertirse en una pequeña ermita aislada de cualquier núcleo poblacional de importancia . Y particularmente, tras la desamortización de Mendizábal de 1837, cuando el estado desposeyó a la iglesia de sus bienes inmuebles.
Por suerte, el complejo fue adquirido por la Diputación de Toledo en 1968, procediéndose a la restauración que le ha devuelto buena parte del antigua esplendor. Particularmente en lo que hace referencia a la iglesia de Santa María de Melque, pues no mucho se ha podido recuperar del monasterio. Sin embargo, en uno de los edificios adyacentes encontramos el Centro de Interpretación de Santa María de Melque, que resulta de lo más interesante para entender el contexto histórico en que creció el mundo visigodo.
HORARIOS PARA VISITAR SANTA MARÍA DE MELQUE Y CÓMO LLEGAR.
HORARIOS.
- Abril-octubre: de martes a domingo, de 11:00 a 20:00 h.
- Noviembre-marzo: de martes a domingo, de 9:00 a 18:00 h.
- Cerrada: lunes y los días 24, 25 y 31 de diciembre, y 1 y 6 de enero
CÓMO LLEGAR A SANTA MARÍA DE MELQUE. Desde Toledo, tomar la CM-4000 hasta la Puebla de Montalban. Ahí, tomad la CM-4009 en direción San Martín de Montalban. Un desvío a mano izquierda os acercará a Santa María de Melque. Si vais en coche, lo mejor es poner el GPS. Esta es la dirección de Santa María de Melque en Google Maps.
PRECIO. Tanto la iglesia de Santa María de Melque como el centro de interpretación es gratuito.
VISITAR SANTA MARÍA DE MELQUE.
Llego a Santa María de Melque procedente de Toledo a las 9 menos algo de la mañana, de manera que me tengo que esperar uno minutos antes de que la encargada del monumento llegue a la iglesia. Me abre el Centro de Interpretación de Santa María de Melque para que lo vaya visitando mientras se dedicá a abrir puertas y luces del templo.
La verdad es que merece la pena echar un vistazo al Centro de Visitante que, como la iglesia, es gratuito. Aquí se explica perfectamente quienes era los visigodos, de dónde procedían, las distintos pueblos que lo formaban y el contexto en que se alzó la iglesia de Santa María de Melque. Además, la visita no os ocupará más que unos pocos minutos.
La Iglesia de Santa María de Melque, que es del siglo VIII u VIII, es un templo de área cruciforme que tiene adosado algunas cámaras en sus brazos. Antes de entrar ya nos damos cuenta de la existencia de ventanas y puertas en forma de herradura, que nos remiten a la arquitectura visigoda. Sin embargo, en la puerta de entrada observamos como parte del espacio que tenía forma de herradura ha sido tapiado con sillares, quedando una portalada rectangular. Durante la época visigoda, el pueblo se situaba por detrás del crucero durante la liturgia, mientras que los monjes se situaban por delante.
El interior de Santa María de Melque está desprovisto de casi toda ornamentación. La iglesia está erigida en regios sillares de granito. También los arcos de herradura que permiten el paso del espacio central a cada uno de los brazos de la planta y que se sitúan sobre pilastras semicirculares adosadas, están igualmente erigidos en sillares de granito. El espacio se cierra mediante bóvedas de cañón de herencia romana. También para ello se usaron bloques de granito.
Sí que encontramos un pequeño altar, que habría sido el original del templo. También encontramos un gran arcosolio en el brazo sur del crucero. Probablemente era ocupado por la tumba de algún personaje de importancia durante el Reino Visigodo de Toledo, quizá del propio fundador de Santa María de Melque.
El altar de la iglesia se sitúa en el ábside central, que es semicurcular solo desde el interior. Desde sendas puertas situadas a izquierda y derecha de este ábside central se puede acceder a los absidiolos laterales, que son posteriores a la fundación del templo. A ellos también se puede acceder desde los brazos norte y sur de Santa María de Melque.
La verdad es que visitar Santa María de Melque, esta joya del arte visigodo español, no ocupa más de media hora (la mitad para el Centro de visitantes y la otra mitad, para el templo en sí mismo). Casi que se tarda más en llegar al lugar que en visitar la iglesia. Sin embargo, por la importancia histórica y artística de éste monumento, merece le pena incluir la iglesia de Santa María de Melque en todo recorrido por la provincia de Toledo.