Que ver en Poznan, primera capital de Polonia.

Poznan ha resultado ser la gran sorpresa en este viaje a Polonia. Se trata de una de las ciudades de mayor tamaño y más importantes del país, hasta el punto de que se considera que fue precisamente Poznan la primera capital del país en tiempos de Boleslao I el Valiente que está considerado como el primero de los monarcas polacos, a finales del siglo X.

Sea como fuere, la cuestión es que la capitalidad fue trasladada a los pocos años a Cracovia, enclave que se consideraba mucho más seguro.

Poznan, sin embargo, sigue siendo un núcleo importante, con una población total de más de medio millón de habitantes, de los que una quinta parte forman la extensa comunidad universitaria de la ciudad. Además, Poznan dispone de la feria de muestras más importante de toda Polonia y es la capital del voivodato o provincia de la Gran Polonia o Wielkopolska.

Hay bastante que ver en Poznan, pero la verdad es que en una jornada se puede disfrutar perfectísimamente de los lugares imprescindibles de la ciudad. Nosotros visitamos Poznan desde Wroclaw (se puede llegar en tren o en coche propio o de alquiler).

En este post os comentaré los lugares más importantes que hay que ver en Poznan, una ciudad verdaderamente agradable.

QUE VER EN POZNAN

STARY RYNEK.

Cuando uno visita Cracovia piensa que es allí donde se encuentra la plaza más bella de Polonia y quizá una de las más bellas de Europa. Luego, al llegar a Wroclaw empiezan las primeras dudas. Finalmente, visitando Poznan las dudad se acrecentan hasta el punto de que la Stary Rynek de esta ciudad nada tiene que envidiar a las fabulosas plazas centrales de Wroclaw o Cracovia.

Solo hay un pequeño apunte que empaña esta comparación y es que buena parte de la Stary Rynek de Poznan debió ser reconstruida tras la Segunda Guerra Mundial, pues los destrozos fueron realmente de impresión durante aquella terrible contienda. Sin embargo, la plaza luce ahora más bella que nunca y es, desde luego, el gran lugar que hay que ver en Poznan y el verdadero polo de atracción de la ciudad.

Se trata de un espacio muy amplio, con gran cantidad de edificios en sus perímetros, casi siempre construcciones de entre tres y cuatro pisos pintados de vivos colores, pero también con un gran túmulo de edificios en su centro que conforma una suerte de isla dentro de la misma plaza.

Es aquí donde se localiza el Ayuntamiento de Poznan o Ratuzs, uno de los edificios más bellos de la ciudad y, verdaderamente, uno de las casas consistoriales más espléndidas de Europa. Se trata de un edificio renacentista que sustituyó al edificio gótico predecesor que fue pasto de las llamas. En el centro de la fachada principal se localiza un reloj que a las 12 en punto del mediodía se convierte en protagonista casi único de la ciudad. Por un par de puertas aparecen una pareja de cabras que chocarán su cornamenta, simulando una batalla, hasta en doce ocasiones. Los turistas se agolpan en la base del Ayuntamiento para disfrutar del momento tal y como hacen en el Ayuntamiento de Praga para disfrutar del espectáculo horario de su reloj astronómico.

 

Visitamos el interior del ayuntamiento que en la actualidad desempeña las funciones de Museo de Historia de Poznan. Los techos del primer piso, con la Sala del Renacimiento que conserva su decoración original de estuco del siglo XVI, merecen la visita entera, más allá de la colección museística. Además, los sábados, cómo muchos de los museos de Poznan, la visita es gratuita.

También en el centro de la plaza se disponen las que son conocidas como Casas de los Pescaderos. Aunque no es más que una reconstrucción de las originales, el conjunto de viviendas soportaladas y pintadas de vivos colores es verdaderamente una delicia y uno de los símbolos de la ciudad.

Nos detenemos en contemplar varios de los edificios del perímetro de la plaza Stary Rynek de Poznan, a cuál más bello. Algunos de ellos son la sede de distintos museos, como el de Instrumentos Musicales, y otros, la mayoría, albergan bares y restaurantes.

MUSEO DEL CROISSANT DE POZNAN

Uno de los edificios que da a la Plaza Rynek alberga el Museo del Croissant de Poznan. Y uno se pregunta, ¿pero qué hace en Poznan un museo del croissant? ¿no es este un producto francés? Pues lo que aquí se explica es el proceso de producción del Croissant de San Martín, una especialidad de la ciudad y que goza del sello de calidad de la Indicación Geográfica Protegida.

En efecto, el Croissant de San Martín o Croissant de Poznan es un croissant concreto, con una receta muy específica y con un tamaño y peso muy delimitado que unos estatutos de la IGP que lo sustentan. En concreto, el croissant de Sant Martín debe pesar entre 150 y 250 gramos. Las distintas pastelerías que lo elaboran deben someterse a una reglas y especificaciones y ganan el certificado que les permite elaborar el producto durante un año. Hay que decir que se trata de un croissant de gusto algo distinto del típico croissant francés. Su palatabilidad nos recuerda más la del mazapán que de la pasta de hojaldre y es mucho más denso y consistente que la media luna francesa.

La cuestión es que este Museo del Croissant es una experiencia interactiva, donde un par de maestros croissanteros enseñan a un público llegado de todas la latitudes cómo se elabora el producto. Para ello, varios voluntarios ayudarán a los maestros a llegar al objetivo de confeccionar el citado dulce bajo las especificaciones que la carta de la IGP indica.

Marc no dudó en sumarse a la pequeña legión de voluntarios, de manera que disfrutó de lo lindo amasando la masa.

El Croissant de San Martín, especialidad de Poznan, se puede degustar durante todo el año, pero tiene en la festividad de San Martín, precisamente, su momento anual de gloria, donde más de 700.000 unidades son elaboradas y vendidas en las distintas pastelerías que disponen del certificado.

IGLESIA PARROQUIAL DE SAN ESTANISLAO

A tres minutos de la Plaza Mayor de Poznan se localiza San Estanislao, quizá la más bella de las iglesias que hay que ver en Poznan. Se trata de un exuberante templo barroco que fue construido por la orden de los Jesuitas.

Aprovechamos que son las 12.15 del mediodía para visitarla, pues es el momento donde se ofrecen conciertos de órgano de libre acceso. Se trata de un fabuloso instrumento que dispone de más de 2500 tubos y que fue construido durante el siglo XIX. Los entendidos dicen que el sonido que el órgano propaga es excepcional. También lo es la decoración de la antigua sede de los jesuitas, aunque el mármol que simula serlo no lo es en realidad, pues para alzar el templo se utilizaron materiales menos nobles aunque igualmente impresionantes para el visitante.

PALACIO GORKI. MUSEO DE ARQUEOLOGÍA.

En una bocacalle que da a la plaza aparece otro de los edificios que hay que ver en Poznan. Se trata de un bellísimo edificio renacentista, que dispone de una elaborada gran portalada de piedra que recuerda a las que hemos conocido en la vía real de Cracovia.

Las ventanas del palacio también nos recuerdan que se trata de una construcción renacentista. Visitamos el Museo Arqueológico que alberga aprovechando que hoy es gratuito (como todos los sábados). Aunque dispone de una colección de arte prehistórico de la región, a nosotros nos gusta bastante más la parte dedicada al Antiguo Egipto, con varios sepulcros y momias de animales e, incluso, con un bonito obelisco.

CATEDRAL DE POZNAN

La Catedral de Poznan se sitúa en la isla de Ostrow Tumski,entre dos brazos del río Varta. Está considerada la más antigua de las catedrales polacas y está dedicada a San Pedro y San Pablo. Como la gran mayoría de grandes catedrales e iglesias polacas (lo hemos visto también en Wroclaw) está construida en ladrillo. El motivo es que Polonia no es país rico en canteras.

Fue En Poznan donde Miecislao I convirtió el país al cristianismo y se proclamó duque de Polonia, de manera que este templo se considera como la primera catedral del país. Lo que podemos ver en la actualidad es el templo gótico que resultó de las distintas reconstrucciones.

CASTILLO IMPERIAL

Nos desplazamos ahora hacia el este de la ciudad. A unos quince minuto a pie, encontramos tres lugares más de interés: el Castillo Imperial, el Monumento a las víctimas de Junio del 56 y el Colegio Minus de la Universidad de Adam Mickiewicz.

El Castillo Imperial de Poznan no es una fortaleza medieval. Se trata de un enorme complejo mandado construir en tiempos de dominación alemana, cuando el Kaiser Guillermo II era quien gobernaba el Imperio Germánico. Sin embargo, durante aquellos años recibió el nombre de Castillo Real.

Durante los tiempos de ocupación nazi, Hitler planeó acondicionar el castillo como residencia personal, algo que ya hemos leído en numerosos lugares. Sin embargo, no queda nada claro que el dictador llegara a residir jamás en este castillo. Las reformas en aquel momento fueron importantes, tanto en su interior como en su forma externa.

Se trata, en cualquier caso, de un enorme edificio construido en arenisca, hormigón y ladrillo que, al menos desde fuera, deja un poquito indiferente. Tras la guerra, el interior de la Castillo Imperial fue rehabilitado por completo y readecuado a las nuevas funciones que desempeñó en cada momento. Entre ellas, las de ser sede la de la Universidad de Poznan.

Actualmente, parte del castillo está reservado para el ZAMEK Cultural Centre, uno de los museos de arte más importantes de la ciudad. Durante nuestra visita, la obra de los artistas mexicanos Frida Kahlo y Diego Rivera han tomado sus dependencia, pero nosotros no tenemos tiempo de visitarlo.

MONUMENTO A LAS VÍCTIMAS DE JUNIO DE 1956

Tan importante a nivel histórico como el castillo es el monumento que se localiza en el parque que queda enfrente del mismo. Es el Monumento a las victimas de junio 56. Se trató de un movimiento obrero que a base de manifestaciones y huelgas se rebeló contra el sistema comunista imperante en aquel momento. “Pan y trabajo” fue el lema de aquél movimiento que fue duramente reprimido por el gobierno polaco y que se llevó por delante la vida de 76 manifestantes y huelguista en el que es conocido como “Jueves Negro”.

COLEGIO MINUS Y UNIVERSIDAD ADAM MICKIEWICZ.

La Universidad de Poznan es una de las más importantes del país, como ya hemos comentado, albergando una comunidad educativa de unas cien mil unidades. Lleva el nombre del que es reconocido como el más importante de los poetas de la patria polaca, Adam Mickievicz.

El Colegium Minus es el edificio más bello de la Universidad y queda justo enfrente del Castillo Imperial. Parece que sea un edificio bastante más viejo pero la verdad es que su nobleza se remonta a principios del siglo XX. Eso sí, su estilo neorenacentista es una auténtica maravilla. Actualmente es la sede del rectorado de la Universidad.

Y hasta aquí nuestra visita a Poznan, una ciudad verdaderamente encantadora y con muchísimo ambiente, probablemente producto de su numerosa comunidad educativa. La verdad es que son suficientes los lugares que hay que ver en Poznan para dedicarle una visita durante un viaje a Polonia. La ciudad, no defrauda.