Que ver en Myanmar en 15 días. 10 visitas imprescindibles.

Que ver en Myanmar en 15 días. En este post os voy a comentar aquellos lugares imprescindibles de Myanmar que podéis visitar en dos semanas (en realidad, nuestro viaje a Myanmar tuvo una duración total de 17 días).

La verdad es que el viaje a Myanmar nos ha sorprendido para muy bien. Sabíamos que se trataba de un país bastante más virgen que Tailandia o Vietnam, que ya llevan bastantes décadas abiertos al turismo de masas. Sin embargo, algunos viajeros habían comentado que, poco a poco, Myanmar estaba tomando el mismo camino que sus vecinos.

Lo cierto es que durante nuestro recorrido por Myanman, que ha acontecido durante la temporada baja (en julio), han sido escasos los turistas occidentales que hemos ido encontrando por el camino. El día con que más nos hemos cruzados con más occidentales habrán sido no más de una docena. Nada que ver con Tailandia, desde luego. Además, dado los problemas que Myanmar está teniendo en el Estado de Rakáin en relación a la comunidad Rohinyá, el flujo de visitantes ha descendido bastante en el último año, según nos han ido comentados casi todos los lugareños con que los que hablamos acerca del turismo en Myanmar.

En cualquier caso, aquí están los 10 lugares que hay que ver en Myanmar en 15 días. Desde luego, en posts posteriores iré ampliando la información relacionada con cada uno de estos lugares.

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QUÉ VER EN MYANMAR EN 10 LUGARES IMPRESCINDIBLES.

YANGON

Yangon es, para la mayoría de los viajeros, la puerta de entrada al país. Se trata de la que fuera la capital de Myanmar hasta hace pocos años y el auténtico motor económico del estado. Pero más allá de ello, es aquí donde encontraréis la pagoda más bella y extraordinaria que hay que ver en Myanmar. Me refiero a la Pagoda Shwedagon, quizá el lugar sagrado más importante y venerado de todo el país y un sitio que destila vitalidad durante todo el día. Tampoco os debéis perder la Pagoda Sule, el Templo Chino o el Museo Nacional.

BAGO

Bago, antigua capital del Reino Mon, supone una estupenda excursión de un día desde Yangon. Aquí encontraréis un montón de templos y pagodas. Entre ellos, lo que contienen dos de los más bonitos Budas reclinados que hay que ver en Myanmar: el Buda Scwethalyaung y el Buda Myathalyaung.

Tampoco os debéis perder el Monasterio Kha Khat Wait Kyaung. A las 10.30 de la mañana medio millar de monjes desfilan en completo silencio en uno de los momentos más bonitos de un viaje a Myanmar. El Budismo impregna casi toda dentro de la sociedad birmana y en Bago es uno de estos lugares donde más se puede comprobar este extremo

GOLDEN ROCK

Otro de aquellos lugares imprescindibles de Myanmar que sale en todas las guías y en muchas de las fotografías que ilustran lo mejor del país. Situado en lo alto de una colina, en una posición inverosímil, encontramos una roca que se sostiene encima de otra, de forma milagrosa. Solo unos pocos centímetros contactan entre ambas rocas y no ha habido terremoto que haya podido con ella.

La roca, dorada por el efecto del pan de oro (de aquí recibe su nombre de Golden Rock) está considerada uno de los lugares más sagrados del país. Aunque no tuvimos la suerte de clara y el día resulto neblinoso a más no poder, la verdad es que la magia del lugar es tal que incluso con la meteorología en contra mereció la pena conocer este lugar.

BAGAN

Bagan es lugar arqueológico más importante que ver en Myanmar y uno de los más bellos de Asia. Miles de pagodas de los siglos XII a XIV se extienden en una superficie de 40 kilómetros cuadrados. Se requieren un mínimo de 2 días para explorar esta zona y maravillarse con tan densidad de templos.

Los amantes de la arqueología tienen en Bagan uno de sus lugares fetiche, a la altura de los templos de Angkor en Camboya.

Parece mentira que durante los dos días en que pudimos visitar Bagan, en ningún momento tuviéramos menos de dos o tres pagodas al alcance de la vista. No creo que esto suceda en ningún otro lugar en todo el mundo.

MONTE POPA

Desde Bagan se puede realizar una excursión al Monte Popa, un volcán extinto que es lugar donde viven los 37 nats, una suerte de espíritus mitológicos integrados dentro del Budismo birmano, venerados y respetados por población.

En lo alto de la colina, y tras superar más de 700 escalones y una nutrida colonia de macacos, disfrutaréis de unas maravillosas vistas de la llanura que rodea esta maravilla natural.

Para algunos es una etapa prescindible dentro de un viaje a Myanmar, pero lo cierto es que a nosotros nos encantó poder conocerlo. Eso sí, si sois muy escrupulosos tened en cuenta de que deberéis subir las escaleras descalzos e ir sorteando pipis y cacas de macacos.

TREKKING DE KALAW AL LAGO INLE

Algo que hay que hacer en Myanmar es un trekking. Ello te permite recorrer algunas zonas más rurales, pasear por la fértil huerta birmana y conocer algunas de las 135 minorías étnicas que se encuentran diseminadas por el país.

Nosotros realizamos un trekking de 3 días desde Kalaw al Lago Inle. Fueron tres días de caminatas a razón de unos 20 kilómetros por jornada, poco exigentes. Resultaron muy satisfactorios y nos permitieron conocer a los Pa-O, sus atuendo añiles y sus viviendas de bambú. Otros viajeros optan por realizar un trekking en Hsipaw, aunque éste se apartaba demasiado de nuestra ruta.

LAGO INLE

Es difícil decir cuál es el lugar que más nos ha gustado de Myanmar, pero seguramente sea el Lago Inle. Los pescadores inta, que se sustentan milagrosamente con una sola pierna mientras con la otra agarran el remo, las comunidades Pa-O que viven alrededor del lago, los pueblos flotantes sobre pilones o las sagradas pagodas que se localizan aquí y allá convierten a este lugar en uno de los que hay que ver en Myanmar de forma imperativa.

KAKKU

Desde el Lago Inle se puede llegar con bastante facilidad hasta este bosque de pagodas que hasta hace bien pocos años estaba cerrado al tráfico occidental. Kakku es un lugar ciertamente hipnótico, en pleno estado Shan, donde se acumulan varios miles de pagodas en un espacio bastante reducido. Se trata de pagodas Shan, bastante más esbeltas que las de Bagan y cuyas campanillas situadas en la sombrilla que las corona no dejan de tintinear ni un solo segundo.

MANDALAY

Mandalay fue la última capital de Myanmar antes de que ésta fuera trasladada a Yangon en tiempos de la colonización británica. Aquí se puede visitar el reconstruido Palacio Real pero, particularmente, un montón de bellísimas pagodas, monasterios y templos de relumbrón que convierten a esta ciudad en una parada imprescindible durante un viaje a Myanmar.

De todas ellas, es la Pagoda Mahamuni quien se lleva todos los parabienes de los fieles de la región. La leyenda cuenta que su Buda tiene más de 2000 años de historia a sus espaldas y que llegó a Mandalay tras ser traído desde Mrauk U, hace solo unos 200 años, tras ser saqueado de su lugar de origen. El bellísimo monasterio de Shwe Inbin, edificado en madera de teca, o el Monasterio Dorado, que se salvó de las llamas que asolaron el Palacio Real al ser trasladado fuera de los muros palaciegos unos años antes del terrible suceso, son otras dos visitas que convierten Mandalay en un lugar mágico.

LAS CIUDADES REALES.

El último lugar que cierra esta lista de 10 sitios que hay que ver en Myanmar lo forman las conocidas como Ciudades Reales. Se trata de tres poblaciones que en su momento (y en conjunto, durante más de 500 años) ostentaron la capitalidad birmana antes de que fuera trasladada a Mandalay.

Son tres, a cuál más interesante: en Amarapura visitamos el puente U-Bein, el más largo del mundo construido en teca, y el monasterio Mahaganayon, auténtico seminario donde conviven más de 1200 monjes budista y donde es posible asistir a su almuerzo.

En Inwa, visitamos un buen número de pagodas y templos así como dos nuevos monasterios: uno en madera de teca (el Bagaya) y otro edificado en piedra (el Maha Aunmye Bonzan).

Finalmente, subimos a la colina de Sagaing, una población que ostentó la capitalidad por un espacio de tiempo realmente breve pero que dispone de un montículo trufado de centenares de templos, monasterios y pagodas. Basta comentar que en los monasterios de la esta colina viven la friolera de 6000 monjes, para entender la importancia que tiene para el budismo birmano. Desde lo alto se disfruta de unas maravillosas vistas del Irrawady desbordado durante la temporada de lluvias.

Estos han sido nuestros lugares favoritos durante nuestro viaje por la antigua Birmania, aquellos que creemos que hay que ver en Myanmar en 15 días. Espero que os animéis a visitar el país. Os aseguro que no os va a defraudar!