Qué ver en el Perigord. Guía para viajar al Perigord 4 o 5 días.

Qué ver en el Perigord en 4 o 5 días. Esta fue nuestra pregunta cuando empezamos a prepararnos para viajar al Perigord, hace ya unos meses. Lo que no sabíamos es que el territorio es tan denso en lugares de interés, tanto histórico, como monumental, natural o gastronómico, que unos pocos días se quedarían demasiado cortos.

Nosotros viajamos al Perigord a finales de verano, antes de empezar el curso escolar. En total le dedicamos una semana entre Burdeos y esta región histórica, de manera que no nos quedó otra que acotar un poco entre los muchos lugares que hay que ver en el Perigord. Desde luego, tocará regresar a esta región que tanto nos ha gustado.

En este post os vamos a contar qué es el Perigord, cómo preparar un viaje por la región, así como algunos de los lugares imprescindibles que no os podéis perder. En otros reportajes iré ampliando la información sobre esta zona del sudoeste de Francia.

QUÉ ES EL PERIGORD.

El Perigord es una región histórica y antigua provincia de Francia situado en la región de la Nueva Aquitania, al sudoeste del país galo. El Perigord es una región bastante vasta que se reparte entre los departamentos de Dordoña y Lot y Garona.

Históricamente se ha dividido el Perigord en cuatro territorios, que reciben el nombre de 4 colores.

• Perigord verde: recibe este nombre por el color de sus bosques de robledales y sus verdes praderas. Nontron es la capital.
• Perigord blanco: conocido así por la piedra calcárea tan típica de la zona y con la que se han construido muchas de las edificaciones de la región. La capital es Perigueux, única sede episcopal de la región.
• Perigord púpura: el vino es lo que da este nombre a la región cuya capital es la histórica y medieval ciudad de Bergerac.
• Perigord negro: los oscuros bosques dan nombre a esta región, aunque también lo podría dar la trufa. La capital es Sarlat la Canéda. Es la zona más histórica y que dispone de más atractivos que ver en el Perigord.

Viajar al Perigord supone tener que escoger y, particularmente, tener que descartar. Nosotros visitamos, básicamente, el Perigord púrpura y el Perigord negro, aunque también disfrutamos de los encantos de la capital del Perigord blanco, Perigueux.

VIAJE DE 4 O 5 DÍAS AL PERIGORD.

Como explicaba, en nuestro caso combinamos el viajar al Perigord con la visita de Burdeos y sus alrededores (Arcachon y la Duna de Pilat y la histórica y vinícola Saint Emilion). Este fue nuestro recorrido.

Como comentaba, viajar a Perigord en verano permite recorrer el territorio hasta bastante tarde y a plena luz del día. Ello, sumado a que muchos de los pueblos que hay que ver en el Perigord no son más que pequeñas villas que se visitan en un espacio de tiempo más bien breve y que las distancias entre ellas son escasas, permite aprovechar mucho el tiempo.

De haber tenido algo más de tiempo, lo hubiéramos empleado en visitar algunos de los enclave trogloditas o prehistóricos del Valle del Vézère, en el Perigord Negro. Les Eyzies de Tayac está considerada la capital mundial de la prehistoria, pero es que la región dispone de 147 yacimientos paleolíticos y 25 cuevas con pinturas rupestres.

CÓMO LLEGAR Y CÓMO MOVERSE EL EL PERIGORD

Lo más habitual es llegar al Perigord por vía aérea o por carretera.

• Por vía aérea. El aeropuerto más cercano es Burdeos, que tiene conexiones con los principales aeropuertos de España. Es lo que hicimos nosotros. Perigueux, capital del Perigord Blanco, dista solo 120 kilómetros de Burdeos.
• Por carretera. Particularmente si vivís en Navarra, País Vasco o Cataluña. De Bilbao a Burdeos hay unos 330 kilómetros. Desde allí se puede seguir ruta hacia el Perigord. Desde Barcelona a Sarlat la Caneda, capital del Perigord Negro, hay casi 600 km. En este caso, una buena idea puede ser hacer algún alto en el camino en Carcasona o Tolouse.

Para moverse por el Perigord no os quedará otra que conducir. Si no disponéis de coche propio os aconsejo mirar en la web de este metabuscador de coches de alquiler donde suelen hacer descuentos del 15% sobre los mejores precios de mercado.

DÓNDE DORMIR EN EL PERIGORD.

Durante esta ruta por los lugares más bonitos del Perigord nosotros nos fuimos moviendo y dormimos en 4 lugares distintos.

PERIGUEUX. les Suites de la Tour. Una apartamento amplio para hasta 4 personas situado en el centro histórico de Perigueux.

PAIS DE BERGERAC. La Ferme de Sirguet. Un lugar de lo más original, con carromatos y apartamentos en lo alto de los árboles. Pero con comodidades, incluida piscina cubierta o sauna. Nosotros mismos hicimos una barbacoa de magret de pato para cenar, que proporcionan desde el mismo establecimiento.

VALLE DEL DORDOÑA. Hôtel Domaine de Monrecour. ¿Sabéis que es posible dormir en un castillo en el Perigord? Y os aseguro que mucho más barato de lo que pensáis. Nos alojamos un día en el Domaine de Monrecour, un lugar excepcional y a diez minutos de coche de todos los pueblecitos que hay que visitar en el Valle del Dordoña.

SARLAT LA CANEDA. Hotel Montaigne. Situado en un edificio histórico en pleno centro de Sarlat-la-Caneda, no se me ocurre mejor lugar donde empezar el día en la capital del Perigord Negro.

QUÉ VER EN EL PERIGORD EN 10 VISITAS IMPRESCINDIBLES.

A continuación os comentaré, de manera más o menos breve, 10 de los lugares más bonitos del Perigord y que hemos tenido la oportunidad de visitar. Como dije, visitar al Perigord supone tener que descartar.

Nosotros solo visitamos parte del Perigord púrpura y del Perigord negro, además de recorrer también Perigueux, capital de Perigord Blanco. Y os aseguro que fue bastante doloroso. Es post posteriores iré desarrollando estos lugares de más interés en el Perigord.

QUÉ VER EN EL PERIGORD BLANCO.

PERIGUEUX

Perigueux merece una visita detallada de, al menos, medio día. Llama la atención que está casi enteramente construido con esta piedra blanca calcárea que proporciona el nombre a la región, el Perigord blanco, de la que es su capital.

El monumento más impresionante de la ciudad es su catedral de Sant Front, que es el templo más importante que hay que ver en el Perigord. El trazado bizantino de este templo del siglo XI, con la poco habitual planta de cruz griega, se superpone a un templo bastante anterior. El juego de cúpulas, también de aire bizantino, inspiraron el Sagrado Corazón de París.

La ciudad medieval creció a lo largo de los siglos, particularmente en pleno renacimiento. Muchos de los palacetes que podemos ver en el centro histórico pertenecen a aquella época, como la Casa del Pastelero o la Casa de los Cónsules, formada por tres mansiones, el Hotel de Lur, la Casa Brogliodie y la Casa Lambert. Muchos de aquellas mansiones disponían de su propia torre.

Casi nada ha quedado, sin embargo, de la antigua muralla medieval, que con 28 torres y 12 puertas debió ser francamente impresionante. En la actualidad solo podemos visitar la Torre Mataguerre. Las vistas desde lo alto merecen a pena.

No dejéis de perderos, sin embargo, por los estrechos callejones de la ciudad vieja, donde os encontraréis con un sin fin de recovecos que se abren a bonitas placitas, y donde las casonas medievales, algunas con su entramado de madera, se alternan con los palacetes renacentistas. Las vistas de la Catedral y de la ciudad, desde la otra orilla del río Isle, merecen la pena.

No nos dio tiempo de conocer los vestigios de la antigua ciudad galoromana de Vesuna, con su anfiteatro o su moderno museo, obra del galardonado arquitecto Jean Nouvel. Quedará para otra ocasión.

QUÉ VER EN EL PERIGORD PÚRPURA.

He dedicado un post completo a Bergerac y la zona que la rodea. Sin embargo, dejadme que os indique aquí algunos de los lugares más interesantes que hay que ver en el Perigord más vitivinícola: el Perigord Púrpura.

BERGERAC

La capital del Perigord Púrpura es una preciosa población medieval a orillas del río Dordoña. Si os acercáis al río podréis ver algunas gabarras. Estas embarcaciones se encargaban del transporte de barricas de vino en la época medieval. En la actualidad, resultan una muy buena manera de surcar el Dordoña por parte de los viajeros.

Las mansiones medievales con entramado de madera se multiplican en esta preciosa ciudad que vive orgullosa de que uno de los personaje más célebres de la historia del teatro lleve su nombre: Cyrano de Bergerac. No os podéis perder la plaza Pelissière, con la iglesia de Saint Jacques y la Plaza de la Mirpe, repleta de mansiones medievales. En ambas encontraréis sendas estatuas de Cyrano. Tampoco puede faltar una visita al claustro de los recoletos que se ubica en la imprescindible y gratuita Maison des Vins.

CASTILLO DE MONBAZILLAC

Son muchos los castillos que ver en el Perigord. Uno de los más escénicos es el de Monbazillac, que está rodeado de viñedos que producen una de las denominaciones de origen más cotizadas del País de Bergerac.

Visitar los jardines es gratuito y os aseguro que merece la pena. Hacedlo por la tarde, cuando el sol os proporcionará las mejores fotografías del castillo y sus viñedos.

CASTILLO BRIDOIRE

Otro de los muchos castillos que hay que ver en el Perigord es esta fortaleza medieval que ha sido recientemente restaurada en los últimos años.

Más allá de visitar las distintas estancias que han sido amuebladas y acondicionadas, aquí se viene a disfrutar también de los más de 100 juegos dispuestos en los jardines del castillo y también en varias de las dependencias del mismo. Es un lugar donde las familias pueden pasar varias horas y que resulta particularmente agradable si realizáis un viaje al Perigord con niños.

PUEBLOS MEDIEVALES Y BASTIDAS DEL PERIGORD PÚRPURA.

Más allá de Bergerac, capital del Perigord Púrpura, hay varias poblaciones medievales que merecen un vistazo en sus alrededores. Issigeac es una de ellas. Se trata de un pequeño enclave anterior a la época de las bastidas, que creció concéntricamente y que presenta un buen número de rincones de lo más fotogénicos, incluidas varias casonas con entramados de madera

También nos encantó Beaumont-du-Périgord, una bastida en forma de H que conserva parte de su muralla y que se dispone alrededor de su placita central donde encontramos la casi universal iglesia fortificada, además de un mercado cubierto. En este caso se trata de una de las bastidas que alzaron los ingleses durante el siglo XIII, en plena Guerra de los 100 años. No os perdáis tampoco una breve parada en Saint-Avit-Sénieur, con una iglesia fortificada que forma parte del Patrimonio Mundial.

QUÉ VER EN EL PERIGORD NEGRO.

SARLAT LA CANEDA

Es la capital del Perigord Negro y una de las poblaciones que, sin discusión, hay que ver en el Perigord de forma obligada.

Más allá de visitar monumentos concretos, como su Catedral de San Cerdos o la Casa Manoir de Gisson, con su torre medieval, lo suyo es pasear sin rumbo por esta encantadora población dorada, cuyos atractivos se abren a cada paso. La Casa de la Boétie, del siglo XVI, es una de las más bellas de la población.

No os faltarán oportunidades para comprar los productos que esta tierra regala. Trufas, aceite de nuez y los derivados del pato son las estrellas de una gastronomía repleta de sensaciones. Las tiendas gourmet se multiplican en este pueblecito repleto de patrimonio protegido. Muy interesante resulta, e este aspecto, el muy pequeño mercado cubierto sito en la antigua iglesia de Santa María. La adjunta plaza de la Liberté, animada con sus terrazas y verdadero epicentro del casco antiguo de Sarlat la Caneda, es otro de los lugares de imprescindible visita.

PUEBLOS MEDIEVALES DEL VALLE DEL DORDOÑA

Algo que hay que ver en el Perigord de forma obligada son los distintos pueblecitos medievales que se sitúan a orilla del río Deordoña y entre éste y los acantilados ubicados en su vertiente norte. Varios forman parte de la lista de los Pueblos más bellos de Francia. Son el caso de La Roque Gageac y Beynac et Cazenac, dos de los lugares más pintorescos del Valle de la Dordoña y que tendrán su post en este blog.

Una posibilidad que merece la pena es realizar un circuito en gabarra por el río Dordoña. Podréis tomar estas embarcaciones tanto en una como en otra población.

BASTIDAS DEL VALLE DEL DORDOÑA

El Perigord está repleto de bastidas. Se trata de los pequeños pueblos fortificados que surgieron durante la Guerra de los 100 años que enfrentó a Inglaterra y Francia.

La mayoría de estas bastidas siguen un mismo patrón: un diseño en damero, unas murallas que defendían la población y una plaza central donde se ubica una iglesia fortificada, que podía ser utilizada como torre defensiva en caso de asedio.Son muchas las bastidas que ver

en el Perigord, pero nosotros tuvimos la oportunidad de conocer dos: Beaumont-du-Perigord, en el Perigord púrpura, y Domme, en el Perigord negro.

JARDINES Y VÍA FERRATA EN LOS JARDINES DE MARQUEYSSAC

Uno de los lugares más bellos del Perigord son estos jardines ubicados en lo alto de un acantilado, a más de 100 metros de altura y junto a un castillo del siglo XIX. Estos jardines de Maqrueyassac son un prodigio del arte ornamental y están formados por un conjunto de setos al que los paisajistas han dotado de unas curiosas y sinuosas formas.

Desde lo alto del acantilado se disfruta de una de las mejores vistas aéreas que hay que ver en el Perigord, alcanzando desde el pueblo de La Roque Gageac hasta más allá del castillo de Castelnaud. Sin embargo, si queréis poner a prueba vuestra valentía, no dudéis en realizar la Vía Ferrata de los mismo jardines. Un recorrido de 200 metros que se cubre en 40 minutos y que resulta apasionante a la vez que de lo más vertiginoso.

EL VALLE DEL VÉZÈRE O VALLE DE LA PREHISTORIA

No podía terminar esta lista de los lugares imprescindibles que hay que ver en el Perigord sin hablar del Valle del Vézère que, con toda justicia, es conocido también como el Valle de la Prehistoria. Hasta 14 lugares han sido incluidos dentro de la lista del Patrimonio Mundial por recordarnos cómo y donde vivía el hombre prehistórico en el sur de Europa.

Nosotros solo pudimos visitar la réplica de las Cuevas de Lescaux, considerada la obra maestra del arte parietal. Os aseguro que este complejo, llamado Lescaux IV y dotado de las más puntera tecnología, resulta de lo más apasionante.
Sin embargo, los yacimientos se suceden en este valle, de manera que no nos quedará otra que regresar si quedemos conocer otros lugares tan significativos como La Roque San Chistophe.

Si queréis saber más acerca de Dordoña-Perigord os invito a buscar información en la completa web de la Oficina de turismo regional.

Y hasta aquí esta lista de lugares imprescindibles que ver en el Perigord, uno de las regiones más interesantes de Francia, tanto a nivel histórico, como artístico y gastronómico y cuya visita de cinco días nos ha quedado muy corta.