A menudo hemos encontrado bellos mosaicos romanos en algunos de los mejores museos arqueológicos del mundo, como en el Museo Arqueológico de Lyon o en el de Nápoles. Otras veces, los hemos observado in situ, en los mismos yacimientos arqueológicos, como en la imprescindible Pompeya, la ciudad romana que la famosa erupción del Vesubio sepultó. Sin embargo, ni en cantidad ni en belleza, ninguno de los conjuntos de mosaicos romanos localizados en el mundo entero se acercan a la excelencia a la que llegaron los maestros que trabajaron en la Villa Romana del Casale.
No es extraño pues, que este monumento forme parte de la lista del Patrimonio de la Humanidad y que sea una de las estrellas de cualquier viaje a Sicilia.
No se sabe con exactitud quien fue el propietario de la extensísima Villa Romana del Casale. Lo que queda claro, desde el momento en que llegamos a la finca, es que ésta no era la de un ciudadano romano cualquiera. Se ha hablado de la posibilidad de que el propietario de esta mansión fuera el coemperador en época de Diocleciano, Maximiliano Hercureo. Ello se debe a que la datación de los mosaicos nos indican de que se trataría de una obra de principios del siglo IV y que en aquél tiempo pocas personas podían permitirse tal cantidad de lujos.
VISITA A LA VILLA ROMANA DEL CASALE
Tras dejar el coche en el parking de pago adyacente a la Villa Romana del Casale y pasar por caja nos dirigimos hacia el interior de la mansión. Unas pasarelas nos permiten recorrer, desde lo alto, la mayoría de estancias de las que dispone la villa y observar como casi todas ellas tienen los suelos decorados, por completo, con los famosos mosaicos que cubren la friolera de más de 3500 metros cuadrados.
Como otras muchas villas y mansiones que hemos tenido la oportunidad de visitar, la Villa Romana del Casale se edifica alrededor de un patio central, que a modo de claustro porticado o peristilo da salida a la mayoría de estancias de la mansión. En el centro del patio se localiza una bonita piscina de formas poligonales y considerables dimensiones. Los suelos del mismo peristilo ya están decorados, por completo, con los famosos mosaicos.
Escenas de circo, de caceras y mitológicas son las preferidas y las que dominan la mayoría de estancias de la mansión, pero el mosaico más impresionante (aunque no el más famoso) es el que es conocido como Gran escena de caza. Se trata de un enorme mosaico de 64 metros de longitud donde se reproducen escenas de caza mayor, siendo la mayoría de animales sacrificados procedentes de África, continente donde Roma disponía de varias colonias. No es difícil distinguir rinocerontes, leones o elefantes entre los muchos animales diseñados con extraordinaria delicadeza.
Sin embargo la más famosa escena de la Villa Romana del Casale es la que se ha convertido en algo así como el emblema de la casa. Se trata del mosaico romano de las Chicas en Bikini, donde 12 jóvenes parecen estar jugando vestidas con esta prenda propia de nuestra época. Los paneles informativos nos aclaran que las chicas no están en la playa pues se trata de atletas disputando distintos juegos.
Otro de los mosaicos que llaman especialmente la atención es el del patio elíptico o Xistus, que sorprende por su originalidad.
Comentar que era tal la importancia de la Villa Romana del Casale que la misma disponía de basílica propia y, además, de unas dimensiones considerables. El suelo de la basílica está igualmente decorado con mosaicos aunque esta vez las delicadas teselas formando todo tipo de escenas han dado paso a baldosas marmóreas de mayor tamaño con las que se ha diseñado el suelo de la misma.
Las estancias que se pueden visitar se cuentan por decenas. La visita, además, se hace siguiendo un recorrido que permite no perderse mosaico alguno. Estamos algo así como una hora visitando la Villa Romana del Casale y salimos convencidos que se trata del más bello conjunto de mosaicos romanos del mundo entero. Sin duda, uno de los monumentos más importantes que hay que ver en Sicilia.
En este post, Cristina Rodriguez, de Ida y vuelta blog de viajes, nos cuenta su visita a la Villa romana del Casale.