Qué ver en OXFORD, la ciudad universitaria por excelencia.

Qué ver en Oxford en un día. O mejor dicho, en medio día. Este es nuestro objetivo para esta famosa ciudad universitaria, pues hemos reservado la tarde para visitar el cercano Palacio de Blenheim, que forma parte del Patrimonio de la Humanidad y que dista unos pocos kilómetros de Oxford.

Oxford es conocida, básicamente, por ser la sede de una de las más importantes y prestigiosas universidades del mundo entero y, junto a la de Cambridge, la más famosa del Reino Unido. Es por ello, que la mayoría de monumentos que hay que ver en Oxford tienen relación con su universidad y, particularmente, con sus distintos colegios o colleges. Y la verdad es que ya os digo por avanzado, que dedicarle únicamente media jornada a Oxford ha sido un error, pues la visita a Oxford merece un día entero. Sin embargo, o sacrificábamos parte de la ciudad universitaria o hacíamos lo propio con el Palacio de Blenheim, pues nuestros días por el sudeste del Reino Unido no dan más de sí.

Oxford supone uno de los tour de un día más fáciles de hacer desde Londres, ya sea en alguna de las distintas agencias especializadas que ofertan la excursión o tomando el transporte público desde la capital inglesa. Nosotros hemos realizado la visita a Oxford, sin embargo, procedentes de Bristol, que ha supuesto nuestra base en este viaje por el Reino Unido.

DATOS PRÁCTICOS PARA VISITAR OXFORD DESDE LONDRES

LA UNIVERSIDAD DE OXFORD.

Como comentaba es la Universidad quien se comporta como el verdadero eje vertebrador que articula la visita a la ciudad de Oxford. Se trata de la más antigua de las universidades anglosajonas y una de las más reconocidas en el mundo entero. Se sabe de su existencia desde finales del siglo XI, es decir que la contemplan más de 900 años.

Sin embargo, hay que saber que la Universidad de Oxford no es más que una suerte de federación de distintos colegios universitarios, los famosos colleges, que funcionan de forma autónoma, con sus propias reglas y presupuestos. Es este un concepto diferente al de las universidades del sur de Europa, de manera que en realidad, los estudiantes de Oxford, más allá de serlo de la propia universidad en sí, lo son de uno u otro colegio en particular.

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QUÉ VER EN OXFORD. UN RECORRIDO DE UNAS 5 HORAS POR OXFORD.

BROAD STREET

Llegamos a Oxford de buena mañana procedentes de Bristol y enseguida nos dirigimos a Broad Street, en el centro de la ciudad universitaria, donde empezaremos nuestro recorrido que nos llevará a conocer algunos de los monumentos y colleges que hay que ver en Oxford.

En esta calle, una de las principales del centro de la ciudad, se localiza el Balliol College, uno de los más reputados de Oxford. Fue fundado a mediados del siglo XIII y es famoso porque, a parte de importantes científicos y otras personalidades, ha dado al país hasta tres primeros ministros: Herbert Henry Asquith, Harold Macmillan y Edward Heath. Justo enfrente del Balliol College se encuentra la Oficina de Turismo que nos ofrece un folleto y un mapa que nos permitirá seguir nuestro recorrido.

SHELDONIAN THEATRE

En la misma calle Broad Street encontramos el Sheldonian Theatre, cuyo artífice fue Christopher Wren, el mismo arquitecto que diseñó la Catedral de San Paul de Londres. Este teatro, edificado en la segunda mitad del siglo XVII, es la sede de algunas de las ceremonias más importantes del año universitario, como por ejemplo las ceremonias de graduación y de matriculación. Justo al lado, se encuentra otro imponente edificio, el Clarendon Building.

PUENTE DE LOS SUSPIROS

Sin embargo, nosotros tomaremos Catte Street en dirección a la más importante biblioteca de la ciudad y una de las grandes edificaciones que hay que visitar en Oxford, la Biblioteca Bodleiana. Antes no podemos dejar de admirar el Puente de los Suspiros, homónimo del famoso puente veneciano y que separa dos de los edificios principales del Hertdord College.

Aunque no se sabe del cierto del por qué de este nombre, hay quien dice que era aquí donde chicos y chicas debían separarse para ir cada uno a sus dependencias, de manera que ello justificaría los suspiros que dan nombre al puente. Sea como fuere, es este uno de los símbolos de Oxford, de manera que fotografiarse con el puente a nuestras espaldas parece casi obligado.

BIBLIOTECA BODLEIANA

Enseguida llegamos a la Biblioteca Bodleiana, que no solo es la más importante de Oxford si no una de las más prestigiosas del país. Se da la circunstancia que todos aquellos libros editados en el Reino Unido deben enviar un ejemplar a la Biblioteca Bodleiana para que lo catalogue y custodie. La historia de la biblioteca se remonta a principios de siglo XVI y los edificios que la componen son imponentes. Sin embargo, nos encontramos con la desagradable sorpresa que las visitas con niños no están permitidas. La verdad es que nos parece bastante sorprendente del Reino Unido, pero así es. Con ello nos conformamos con visitar solamente el patio de esta maravillosa biblioteca.

CÁMARA RADCLIFFE

Tampoco podemos entrar, por tanto, a la famosa Cámara Radcliffe que se encuentra justo al lado de la Biblioteca Bodleiana y que es una de las dependencias más bellas de la misma. La Cámara Radcliffe es un edificio autónomo, de planta circular, con aires neoclásicos y coronado por una solemne y elegante cúpula.

ALL SOULS, OTRO DE LOS COLLEGE QUE VER EN OXFORD

En la misma plaza donde se ubica la cámara Radcliffe se ubica también uno de los college más prestigiosos de Oxford, el All Souls. La verdad es que todo el funcionamiento de la Universidad de Oxford nos sorprende sobremanera, pero el caso del All Souls Colegge ya parece llegar al súmmun. Según creemos entender, en este college no se ofrecen grados universitarios si no únicamente postgrados. El examen para poder ser incluido como alumno está considerado como uno de los más dificultosos de todo el país, hasta el punto de que únicamente uno o dos alumnos por año consiguen plaza en el All Souls.

La cuestión es que los cursos a los que acceden estos privilegiados están completamente personalizados y, además, la beca cubre la totalidad de los gastos que, según parece, no son precisamente pocos. Por el mero hecho de ser admitido como estudiante de doctorado en el All Souls, el alumno se convierte, además, en miembro del profesorado de la Universidad de Oxford. El patio del All Souls College, tapizado por completo de césped y rodeado de tan imponentes edificios, es uno de los más bellos de Oxford.

SAINT MARY THE VIRGIN

Nos acercamos enseguida hasta el cruce de Catte Street con High Street, la más ancha avenida del centro de Oxford. En esta situación se localiza otro de los monumentos que hay que ver en Oxford. Se trata de la iglesia de Saint Mary the Virgin, el templo de University Church of St Mary the Virgin. Es este uno de los templos más imponentes de la ciudad con su aguja gótica sobresaliendo por encima del resto de edificios. Visitamos la iglesia gótica pero con muchas remodelaciones posteriores, admirando su arquitectura y sus bellos ventanales y vidrieras. Sin embargo, no podemos subir a la torre desde donde se tienen unas bonitas vistas de la ciudad y, particularmente, de la Cámara Radcliffe que queda justo enfrente de Saint Mary the Virgin.

Una buena manera de visitar Oxford desde Londres es realizar una visita guiada combinada de la mano de una agencia especializada. Una opción con muy buenas recomendaciones en la que ofrece Paseando por Europa. Su tour en español te lleva de visita a la ciudad Universitaria. Además, en la misma jornada se visita la bonita población de Stratford, donde visitarás la casa natal de Shakespeare, y los Montes Cotswold con sus pintorescos pueblecitos.

CORPUS CHRISTI COLLEGE

Seguimos nuestro camino que nos llevará hasta el que es uno de los colleges más famosos de Oxford: Christ Church. Antes, sin embargo, pasamos por delante y entramos al patio del Corpus Christi College, que pese a tener un tamaño mucho más pequeño que las grandes instituciones universitarias de Oxford es reconocido por sus excelentes resultados deportivos.

Este college está hermanado con su homónimo de Cambridge. Esta Universidad es, como digo, una de las más pequeñas de Oxford, con solo unos 350 estudiantes de los que dos terceras partes lo son de pregrado. Sin embargo, su reputación no es poca puesto que los exámenes requeridos para entrar en ella están considerados, también, entre los más difíciles de superar. Esta institución fundada en el siglo XVI se jacta de ofrecer estudios independientemente de la condición social del estudiante y solo basándose en el resultado de las pruebas de acceso y a su currículum académico.

Tras salir de Corpus Christi tomamos Bear Loan pasando por delante de uno de los pubs más conocidos de Oxford, The Bear Inn. El establecimiento se fundó en la lejana fecha de 1242, siendo anterior a la mayoría de colleges de Oxford. Sin embargo, el edificio actual es posterior. Sería este un buen momento para disfrutar de una fría pinta. Sin embargo, el tiempo nos apremia.

CHRIST CHURCH, EL COLLEGE MÁS FAMOSO DE OXFORD

Ahora sí, nos acercamos al Christ Church, quizá el más famoso de los colleges de Oxford. Ya era famoso y reputado, desde luego, antes de que parte de la saga cinematográfica de Harry Potter eligiera como plató de rodaje a algunas de las estancias del Christ Church. Sin embargo, es verdad, que la popularidad del college aumentó a partir de aquella efeméride de manera que no solo los interesados en el arte y la historia se acercan actualmente a visitar el Christ Church, si no que para la legión de seguidores de Harry Potter el college en cuestión se ha convertido en el gran monumento que hay que ver en Oxford.

El Christ Church College fue fundado en 1546 y es uno de los mayores, en tamaño, de todo Oxford. Además, entre sus dependencias, cuenta con la Christ Church Cathedral, es decir, la iglesia catedral de la Diócesis de Oxford. Por desgracia no la podremos visitar por estar hoy cerrado, al igual que parte de las dependencias del Christ Church College. Sí que podremos visitar otras estancias, incluidos sus bellos patios, algunos dispuestos a modo de claustro. Si decíamos que Balliol College fue el lugar de estudio de tres primeros ministros, ni más ni menos que trece estudiantes del Christ College llegaron a esta condición. Con mucha pena, no podemos visitar ni la Catedral de esta Universidad ni su Great Hall, algo así como el Sancta Santorum de los seguidores de Harry Potter.

CARXAF TOWER

Salimos del Christ Church College por St Aldates Street, una de las avenidas principales del centro de Oxford que se sigue de Cornmarket Street, la más comercial de la ciudad. En el cruce con High Street se localiza uno de los edificios más antiguos de Oxford, la Carfax Tower, que no era otra cosa que la torre de la iglesia de St Martin. Según parece no está permitido construir ningún edificio más alto que la Carfax Tower en toda la ciudad. Es posible subir hasta lo alto del edificio, pero tras unas cuatro horas paseando sin descansar un solo momento, decidimos buscar algún pub para tomar asiento, comer tranquilamente y dar por finalizada nuestra visita a Oxford.

Como expliqué al principio, unas 4 o 5 horas para visitar Oxford suponen un tiempo demasiado escaso. A parte de los colleges que he comentado hemos podido echar un vistazo a los patios de varios más. Sin embargo, hay que saber que las visitas enteras son, normalmente, de pago y con unos horarios limitados, por lo que no estará de más decidir de antemano cuál visitar y cuál no.

De no estar prohibida la entrada a los menores de 12 años, hubiéramos intentado realizar la visita guiada a la Bodleian Library y la Cámara Radcliffe. Creo que es uno de los grandes monumentos que hay que ver en Oxford y fue una pena no poderlo visitar por dentro. Igualmente, la visita a Christ Church College me parece imprescindible.

Sin embargo, vale la pena estar al quite para saber qué días y a qué horas se permitirá visitar tanto el Great Hall como la Catedral adyacente al college, pues nosotros no pudimos visitar ni lo uno ni lo otro. Igualmente interesante debe ser la visita al Ashmolean Museum, situado en el centro de la ciudad y considerado el más antiguo entre los museos universitarios. Su colección de arte tiene mucho prestigio, incluidas piezas minoicas o egipcias, así como pinturas y dibujos de artistas tan reconocidos como Rafael, Renoir, Picasso o Rembrandt.

VOLAR A REINO UNIDO PARA VISITAR OXFORD

Para visitar Oxford debe volarse a alguna de las ciudades más cercanas que tienes aeropuerto. En nuestro caso volamos a Bristol (a una hora y media de Oxford) puesto que visitamos parte del sudeste del Reino Unido incluyendo Cardiff, la capital de Gales.
Sin embargo, lo más habitual es volar a Londres, que se localiza a una hora de la ciudad universitaria. Actualmente son hasta 6 los aeropuertos localizados en el área de influencia de Londres (Heathrow, Gatwick, Luton, London City, Stansted y Southend). Vale la pena cotejar las distintas ofertas aéreas. En la siguiente infografía tenéis información acerca de las distintas maneras de desplazarse hasta la ciudad de Londres desde los distintos aeropuertos.

Así pues, aquí termina nuestra visita a Oxford, uno de los mejores tour de un día que se pueden hacer desde Londres o desde Bristol (este ha sido nuestro caso). Es ahora momento de desplazarnos hasta el bello Palacio de Blenheim, Patrimonio de la humanidad y del que os cuento su historia en este post.