Describir la Antigua Grecia en 10 monumentos es el nuevo reto que nos hemos propuesto con Dani y Florencio, mis amigos viajeros autores de los blogs de viaje Viatges Pedraforca y Fmanega por el mundo.
Después de haber dedicado un post a algunos de los monumentos más emblemáticos de la Antigua Roma, esta vez le ha tocado el turno a la Antigua Grecia. La Antigua Grecia sin embargo, tuvo un comportamiento y organización política bastante distinta al de la Antigua Roma, como comentaré brevemente.
Es verdaderamente difícil situar en la Historia el inicio de lo que consideramos la Antigua Grecia. Se sabe de la existencia de asentamientos humanos en la actual Grecia desde la época paleolítica. También de la existencia de distintas oleadas migratorias procedentes de Oriente Medio y Mesopotamia que se habrían unido a las distintas tribus existentes ya en la península ática. Posteriormente serían dos civilizaciones las que dominarían durante varios siglos la cultura de la actual Grecia y sus islas. Fueron Micenas en la Grecia peninsular y Cnossos y la cultura minoica en la isla de Creta (ambas florecieron en la segunda mitad del II milenio aC).
Tampoco hay que olvidarse de la Civilización Cicládica, anterior a las minoica y micénica, que fecha del III milenio aC y que tiene su origen y desarrollo, como su nombre indica, en las Islas Cícladas, que también pertenecen al actual estado griego.
Es por ello que podemos situar el inicio de la Antigua Grecia en el momento posterior al derrumbe de la civilización minoica, momento conocido como Época Arcaica. A diferencia de Roma, sin embargo, no fue una sola ciudad la que impuso su supremacía, si no que fueron muchos los núcleos poblacionales que se fueron estableciendo tanto en el Ática como en la península del Peloponeso. Argos, Corinto y, sobretodo, Esparta y Atenas, que fueron los dos núcleos poblacionales de mayor importancia. Estas poblaciones eran conocidas como polis y mantenían lazos comerciales y, a menudo, militares, aunque no pocas veces entraban en confrontación
Parece ser que fue un problema básicamente demográfico lo que originó la expansión de estas polis griegas en busca de nuevos horizontes más allá de sus núcleos poblacionales originales. Es decir, la expansión de la Antigua Grecia no se habría producido tras un ansia colonizadora en pos de acumular riquezas para la clase gobernante de la capital (como sí que habría sucedido en la Antigua Roma y en otras civilizaciones del pasado). Tanto es así que, prácticamente siempre, las distintas colonias establecidas a lo largo y ancho del mediterráneo acababan por establecerse como pequeñas ciudades-estados con una autonomía casi absoluta respecto a la población de donde procedían.
Debemos situar el inicio de este periodo colonizador sobre el año 750 aC. Durante unos 250 años se establecieron colonias griegas en latitudes tan distantes como en las costas de Asia Menor (en la actual Turquía), la Costa Iliria (corresponde a la franja mediterránea de la antigua Yugoslavia hasta Albania), la Costa Tracia, la Magna Grecia (entendiendo como tal el sur de Italia y Sicilia), el norte de la Península Ibérica, el sur de la actual Francia, Chipre o parte de la orilla sur del Mediterráneo (en la zona que corresponde hoy a Egipto y Libia).
En esta lista de 10 monumentos, polis o ciudades de la Antigua Grecia que merece la pena conocer haremos mención a varias de las colonias griegas que se establecieron a lo largo del Mediterráneo, así como algunas de las poblaciones que hemos tenido la oportunidad de conocer en las penínsulas del Ática o del Peloponeso. Hay que tener en cuenta que algunas de ellas se establecieron en localizaciones donde ya existía previamente una población. Y más, aún, con la colonización por parte del Imperio Romano de muchas de ellas, dichas polis acaban por convertirse en una fusión de ambos periodos históricos, por lo que es habitual hablar de ellas como de Ciudades Grecorromanas.
A modo de complemento, quisiera indicar también los 4 periodos en que se divide la Historia de la Antigua Grecia, desde la caída de la civilización micénica:
- Época Arcaica: desde el siglo IX aC hasta la Revuelta jonia del 499 aC.
- Época Clásica: desde la Revuelta jonia hasta las Guerras de Alejandro del 323 aC.
- Época Helenística: desde las Guerras de Alejandro hasta la Anexión a la República Romana tras la Batalla de Corintio en 146 aC.
- Época Romana: desde la batalla de Corintio hasta el Establecimiento de Bizancio como capital del Imperio Romano el 330 dC.
LA GRECIA CLÁSICA EN 10 YACIMIENTOS ARQUEOLÓGICOS Y MONUMENTOS
ACRÓPOLIS DE ATENAS
La visita a la Acrópolis de Atenas es, que duda cabe, el lugar más importante que ver en Grecia. En esta colina encontramos el que fue el epicentro de la cultura griega durante siglos, tanto a nivel político como religioso.
Tras superar los Propileos, la monumental entrada a la Acrópolis de Atenas, nos encontraremos con el Partenón, el templo más importante de Grecia y uno de los monumentos más famosos de Europa. Obra de Calícrates e Ictino, el Partenón fue construido íntegramente de mármol blanco en época de Pericles. Está dedicado a la diosa protectora y homónima de Atenas, Atenea Parthenos y supone el momento culminante del orden dórico. Fue construido entre el 447 y el 432 antes de Cristo.
También en la Acrópolis de Atenas encontramos otros templos no menos célebres como el Erecteion con sus famosas cariátides, así como parte de los escenarios más importantes de la vida civil en la Antigua Grecia como el Odeón de Herodes Ático o el Teatro de Dionisio.
SANTUARIO Y ORÁCULO DE DELFOS
Los antiguos griegos acudían al Oráculo de Delfos para saber sobre su futuro. El Santuario y Oráculo de Delfos fue un enorme recinto sagrado, localizado en un entorno excepcional, a la faldas del Monte Parnaso. No solo los particulares acudían al santuario. También importantes decisiones de estado, en particular en lo que hacía referencia a las distintas contiendas bélicas, podían decidirse según los designios del oráculo de Delfos.
Es a Apolo, a quien se le atribuye la fundación del oráculo, que fue creciendo en importancia gracias a las múltiples donaciones recibidas. Fundado sobre el siglo VIII aC, el Oráculo de Delfos fue arrasado por el fuego en 548 aC, aunque fue completamente reconstruido dada la importancia que tenía en la cultura de la Antigua Grecia. A partir del siglo III aC entró en declive tras la concurrencia de varios terremotos y de distintos ataques de tropas enemigas.
Neron, ya en la época de la Grecia Romana, fue quien lo destrozó casi por completo y abolió momentáneamente el oráculo. Y aunque posteriormente el emperador Adriano restauró su culto, el oráculo de Delfos jamás recobró la importancia del pasado.
EPIDAURO Y SU TEATRO
Ya en la península del Peloponeso fueron varias las ciudades que se consolidaron como ciudades estado, aunque unidas de forma comercial y, a veces, hasta militar, en forma de distintas asociaciones como la Liga del Peloponeso. Son varios los monumentos que destacan en Epidauro, como el Santuario de Asclepio o el precioso estadio de 181 metros de largo.
Pero en gran monumentos que hace famoso a Epidauro y que es uno de los más bellos de la Antigua Grecia es su fenomenal teatro, uno de los que mejor se conservan entre los que se construyeron en la antigüedad. Data del siglo IV antes de Cristo y fue construido bajo un diseño de Policleto el Joven. La cávea daba cabida a unos quince mil espectadores que disfrutaban de una acústica excepcional.
SANTUARIO Y ESTADIO DE OLIMPIA
Fue en Olimpia donde se celebraron durante más de 400 años los Juegos Olímpico de la Antigua Grecia.
Los primeros se celebraron el año 776 aC. Y a partir de entonces, cada 4 años hasta su abolición en el siglo IV, por parte del emperador Teodosio. No eran estos los únicos juegos que se celebraban en la Antigua Grecia. Otro ejemplo, podían ser los Juegos Píticos que se celebraban en el Santuario de Delfos. Sin embargo, y sobre todo tras la restauración de los mismos llevada a término por el barón Pierre de Coubertin en 1896, son considerandos como los más importantes de la Antigua Grecia.
Aunque durante los primeros años, eran los mejores atletas del área de Atenas y del Ática quienes acudían cada 4 años a Olimpia en busca de la gloria olímpica, poco a poco el certamen fue tomando mayor importancia, hasta el punto de que atletas de todos los dominios griegos (como Asia Menor, Magna Grecia o zonas tan alejadas como las colonias que corresponden a la actual Siria ) acudían al Santuario para disputar los Juegos. Célebre es la conocida como Tregua Olímpica, que consistía en un salvoconducto del que disponían atletas y asistentes a los Juegos con el fin de poder cruzar las zonas con conflictos sin tener problemas.
Son varios los monumentos que podemos conocer en Olimpia, como el gimnasio o los templos de Hera o Zeus. Pero el más emblemático es, sin duda, el Estadio, del que se conservan las lineas de salida y llegada. Es difícil sustraerse de la tentación de hacer una carrera ante tan histórico escenario.
CIUDAD SAGRADA DE DELOS Y TERRAZA DE LOS LEONES
Fue en las Islas Cícladas donde nació la Civilización Cicládica, anterior a las que conocemos como Antigua Grecia. Sin embargo, ya durante la época de la Antigua Grecia, las islas fueron colonizadas por distintas colonias como es el caso de la isla de Delos, a pocos kilómetros de la turística Mikonos. El momento de mayor esplendor en Delos correspondió a los siglos VII a V. De este periodo son los principales monumentos que podemos observar hoy en Delos.
Según la leyenda es aquí donde nacieron Apolo y Artemisa, y donde se localizaba el mayor y más importante Santuario dedicado a Apolo durante la Antigua Grecia. La importancia era tal, que en Delos no se permitía nacimiento ni fallecimiento alguno.
Aquí podemos disfrutar de las ruinas de barrios enteros, donde podemos comprender el refinamiento en el vivir del que gozaba la aristocracia de la época, con viviendas bellamente decoradas con mosaicos.
En Delos también podemos visitar un teatro que aprovecha el pendiente natural de la isla así como la famosa terraza de los leones, donde se conservan 6 de las entre 10 y 18 esculturas de leones originales, realizados con mármol de Paros. Las esculturas actuales son replicas del original.
CIUDAD DE ÉFESO
Éfeso fue una de las colonias que la Antigua Grecia desplegó por el actual territorio de la Península Anatolia de Turquía, lo que en aquel momento se conoció como Asia Menor.
Parece que la fundación de Éfeso se habría debido a los colonos jonios dirigidos por Androclo, hijo del rey ateniense Codro. Sin embargo, aquello no habría sido un territorio virgen en aquel momento, pues parece que léleges y carios ya habitaban la región en aquel periodo y fueron expulsados por los jonios. Tras los jonios, fueron muchos los pueblos que habrían pasado por Éfeso, entre ellos los persas.
También se sabe que a mediados del siglo V aC, Éfeso formaba parte de la liga de Delos, la asociación de carácter político-militar, liderada por Atenas pero con sede en la isla de Delos, que incluía ciudades-estado griegas del Ática, de las islas del mar Egeo y de las costas de Asia Menor, como Éfeso. Sin embargo, los efesianos se rebelaron contra el poder ateniense que acabó por atacar Éfeso. Fue el sátrapa persa Tisafernes quien salió el defensa de los efesianos.
También Alejandro Magno dejó su huella en la Éfeso tras invadir la ciudad en 334 aC, así como el Egipto Ptolemaico y el Imperio Seleúcida durante el período helenístico, aunque tras diversas vicisitudes más fueron los romanos quienes, finalmente, se hicieron con la plaza. En realidad, fue este uno de los momentos de mayor esplendor, de manera que una gran parte de los grandes monumentos que se conservan en las fantásticas ruinas de Éfeso corresponden al periodo romano, siendo la Biblioteca de Celso el más maravilloso de todos ellos.
Otros espacios, como su bello teatro, corresponden a la época helenística aunque, posteriormente, fue adaptado y ampliado por los romanos. Su aforo, de 25 mil personas, era uno de los mayores de la antigüedad y las medidas de su cávea (una herradura casi perfecta de 220 grados con un diámetro de 151 metros) son realmente de impresión.
COLONIA DE AMPURIAS
Los distintos colonos griegos fundaron, a su vez, otras colonias. Y este fue el caso de Ampurias, pues fueron los griegos de Focia, una colonia griega de Asia Menor (en la península de Anatolia de la actual Turquía) quienes fundaron Masalia, la actual Marsella. Y fueron aquellos focios de Masalia quienes acabarían fundando esta nueva colonia en el norte de la península ibérica, en la actual comarca catalana del Alto Ampurdán.
Sin embargo, como muchas colonias griegas, fue posteriormente colonizada por Roma (fue en 218 a.C. cuando los romanos llegaron a Ampurias), de manera que el yacimiento actual recibe la consideración de grecorromano.
Casi no recuerdo la última vez que visité Ampurias (o Ruinas de Empúries), pero sería durante mi época escolar. Es decir, hace ya más de 25 años de ello. Poco en relación a la historia de la colonia, cuya fundación se remontaría al 575aC, pero demasiado si tenemos en cuenta que Ampurias se localiza bien cerca de donde vivimos.
Como muchas de estas colonias grecorromanas se hace difícil discernir qué es lo griego y qué lo romano en el yacimiento. Muchas de las viviendas señoriales que disponen de mosaicos así como el viejo foro corresponden a la época romana. Sin embargo, otros vestigios como la bella estatua de Asclepio, Dios griego de la medicina, corresponden a la época griega.
Ampurias fue, por cierto, el lugar donde se recibió la llama olímpica de los JJOO de Barcelona, el año 1992.
TEMPLOS DE PAESTUM
El Recinto Arqueológico de Paestum, que se encuentra 90 kilómetros al sud de Nápoles es uno de los más interesantes de la Magna Grecia, el territorio ocupado por los colonos griegos en el sur de la península italiana y en Sicilia.
Paestum fue fundada a finales del siglo VII aC por colonos de Sybaris, otra de las colonias de la Magna Grecia.
En el Parque Arqueológico de Paestum destacan, sobre todo, los tres templos dedicados a Hera, Apolo (o Neptuno) y Atenea (o Ceres), que habrían sido fundados en época de la Antigua Grecia, aunque tras la colonización romana, se habrían reconvertido al culto romano. También podremos recorrer en Paestum parte del foro romano.
El Templo de Neptuno, conocido como templo del Poseidón y construido en travertino sobre el año 450 aC, es uno de los templos dóricos griegos mejor conservados del mundo. Fue este, en realidad, un templo dedicado a Apolo, una de las más importantes divinidades griegas.
La verdad es que la estampa de los tres templos griegos localizados sobre la llanura de Paestum es una de las más bellas de Italia.
PÉRGAMO Y EL ASCLEPEION
Pérgamo es otra de las colonias que la Antigua Grecia fundó en Asia Menor. Como muchas otras ciudades griegas, su origen se pierde entre la leyenda y la historia. Lo primero nos explica que habría sido fundada por Pérgamos, hijo de Neoptólemo y Andrómaca, personajes mitológicos relacionados con la Guerra de Troya.
Sin embargo, parece ser que habría sido durante el periodo helenístico cuando la ciudad de Pérgamo llegó a su momento de mayor gloria y en particular, durante la época en que Filetero, comandante a las órdenes de Lisímaco de Tracia fue nombrado comandante de la zona de Pérgamo. Con Filetero empieza una dinastía que no termina hasta en el año 129 a. C. con el rey Eumenes III.
En la Acrópolis o Ciudad alta de Pérgamo encontramos los vestigios más importantes de aquella época dorada. El teatro, el santuario de Atenea Nikéforos, el gran altar de Zeus o la Biblioteca (la segunda más importante de la Antigua Grecia tras la de Alejandría) eran solo algunos de los monumentos más importantes de aquél momento.
Solo algunos de aquellos espacios han resistido el paso del tiempo, como el teatro, que daba cabida a más de 10.000 espectadores y que se construyó en una ladera natural francamente empinada. Tampoco hay que dejar de visitar el Asclepeion, que se encuentra a unos 3 kilómetros. Fue esta una escuela de médicos de importante fama en aquellos tiempos, siendo el conocido médico Galeno, uno de los personajes más conocidos que impartieron cátedra en el Asclepeion.
Sin embargo, no encontraremos el Altar de Zeus, uno de los monumentos más extraordinarios de la Antigua Grecia y que originariamente se localizaba al sur del teatro. El friso que representa la lucha entre los gigantes y los dioses de la mitología griega y que se conserva en el Museo de Pérgamo localizado en la ciudad de Berlín, junto a gran parte del altar que ha sido reconstruido, da fe de la importancia de este monumento.
CIUDAD DE APAMEA
Los dominios de la Antigua Grecia, llegaron hasta casi todos los confines del Mediterráneo. En este caso, la ciudad de Apamea se localiza en la actual Siria. Se sabe de la existencia de emplazamientos humanos en Apamea desde el paleolítico. Sin embargo, tras las conquistas de Alejandro Magno, la plaza se convierte en colonia macedonia con el nombre de Pella. Es a partir de entonces, y durante el periodo helenístico, cuando Apamea se convierte en un centro de cierta importancia. Es Seleuco I Nicátor, rey seleúcida, quien en el año 300 aC., rebautiza a la ciudad con el nombre de Apamea, en honor a su esposa, Apama.
En el año 64 antes de Cristo, Pompeyo anexiona la ciudad al Imperio Romano. Es por ello que, una vez más, las ruinas que podemos visitar (o que se podían visitar antes de la infausta guerra de Siria) son calificadas de grecorromanas, no siendo nada fácil discernir que elementos corresponden a uno u otro periodo.
La Gran Columnata de Apamea es su elemento más conocido y tiene una longitud de cerca de 2 kilómetros. La construcción de la Gran Columnata tuvo lugar durante el período de reconstrucción tras el terremoto de Antioquía, del 115 dC, por lo que se trataría de una obra romana que se localiza en lo que era el Cardo Máximo de la ciudad.
Y con las ruinas grecorromanas de Apamea terminamos nuestra relación de 10 localizaciones de la Antigua Grecia que merece la pena visitar. Por desgracia, son muchos los yacimientos griegos que no he tenido la oportunidad de conocer y a los que les tengo especial ganas. Un ejemplo son los distintos yacimientos localizados en Sicilia. Sin embrago, espero esta relación os haya gustado y os animo a visitar los blogs de Dani y Florencio, donde nos mostraran 10 de los monumentos o yacimientos de la Antigua Grecia que han tenido la oportunidad de conocer durante sus viajes.
Comentarios:
16 comentarios en “LA ANTIGUA GRECIA en 10 monumentos.”
Apamea ha sido un descubrimiento para mi, la única que no conozco y que tan siquiera sabía que existiera. Yo seguramente la hubiera cambiado por Segesta en Sicilia.
Un abrazo y gracias por esta clase de cultura griega.
Me lo apunto, he estado 2 veces en Grecia y… me falta mucho todavía por descubrir!!
Yo también espero poder volver a Grecia. Me quedaron demasiados rincones por conocer. Un saludo Ivan!
La información que suministran; hace que mi mente regresa al a escuela media; cuando amaba saber sobre la antigua civilizacion greco-romana; y como dicen x alli, hay que desear con fuerzas aquello que anhelas; entonces el universo te lo pone al alcance de la mano!!!!
En esta nueva etapa de jubileo; porque no!!!
Vivo en Ciudad de Buenos Aires, Argentina; me gustaría recibir información para armar un viaje; desde Roma x Napoles de alli en barco a islas griegas y Turquia
Me gustaría transitar por lugares en dónde, los dioses y los hombres tejian bellas historias de amor y trajedías
Pues fíjate que tengo Sicilia entre ceja y ceja y no hay manera de visitarla. Selinute, Segesta, Taormina…cuando pasado griego por allí!
Pues tienes que ir. Yo la verdad es que la visité antes de que se pusiera de moda, hace 20 años, y disfruté en soledad de todos esos lugares!