Un año más que se acaba y es hora de hacer repaso de lo que han dado los viajes del 2014. No nos podemos quejar. Este año hemos podido disfrutar en mayor o menor medida, y ya sea en grandes viajes o en escapadas de 4 o 5 días de 10 países diferentes.
Los dos grandes viajes del año han sido a Centroamérica, para poder profundizar en la cultura maya que ya nos había encantado hace casi 10 años al visitar México, y al Cáucaso, donde pudimos conocer Armenia, Georgia y Nagorno-Karabaj. Fueron viajes en familia que pudimos disfrutar los tres: Isa, Marc y yo, Jordi.
Además, una escapada de 4 días a la Costa Azul francesa me permitió conocer esta zona de Francia que no había tenido la oportunidad de visitar, esta vez en compañía de mi hermana y de mi padre.
Los otros tres viajes de 2014, también han sido escapadas cortas. Dos escapadas por España (a Madrid, con una incursión en Alcalá de Henares y a Málaga, en compañía de mi grupo de toda la vida y donde fuimos a celebrar los 40 años).
Y para acabar el año, cuatro días en Dubái. Con ello, el autor del blog llega a los 80 países conocidos. Y Marc, con 6 años, y si no nos hemos contado mal, llega a los 39 países.
Esperando que el 2015 sea tan provechoso como el 2015, aquí os dejo cuatro apuntes sobre los países visitados este año.
Formó parte de nuestro viaje estrella del año. 17 días entre Guatemala, Belice y una pequeña incursión en Honduras que nos salieron por un precio muy asequible (podéis ver aquí el presupuesto del viaje). La Ruta Maya, con recintos arqueológicos tan extraordinarios como Tikal, era la estrella del viaje, pero también pudimos disfrutar de la etnología maya contemporánea, con unos mercados extraordinarios, o de la bonita ciudad de Antigua Guatemala, probablemente, una de las más bonitas de América.
Después de unos días recorriendo Guatemala, nada mejor que unos días de descanso entre aguas coralinas los Cayos de Belice. Pudimos nadar entre tiburones y mantas en Cayo Caulker o disfrutar de islas desérticas, como Caye Goff, que pensábamos que sólo estaban al alcance de aquellos que mueven el mundo. La Ruta Maya tiene también su peso en el único país centroamericano de habla inglesa, por lo que disfrutamos del bellísimo recinto de Lamanai.
La incursión en Honduras se limitó al pueblo de Copán Ruinas que da cobertura al recinto maya de Copán, uno de los más importantes de esta civilización y que tuvimos la oportunidad de poder disfrutar en un paseo que no olvidaremos.
El viaje del verano nos llevó a conocer parte del Cáucaso, una de las regiones europeas más enigmáticas y que teníamos ganas de visitar. Georgia, Armenia y Nagorno Karabaj fueron los tres países visitados. En este post podéis ver el itinerario y el ajustado presupuesto que utilizamos. Lo que más nos gustó de Georgia fueron los paseos por la cordillera del Cáucaso, donde pudimos disfrutar de algunos trekkings inolvidables, pero también, la ciudad de Mtskheta, donde se encuentran algunas de las iglesias más fascinantes de toda la región y que forma parte del Patrimonio de la Humanidad.
Una de las culturas más fascinantes de Europa es la Armenia, por lo que el viaje por este país nos llevó a conocer una serie de monasterios absolutamente increíbles y que siempre quedarán en nuestra memoria. Entre ellos, los monasterios de Geghard, Sanahin o Tatev nos parecen dignos de estar incluidos en la lista de los monumentos más extraordinarios de toda Europa. También disfrutamos de la ciudad de Echmiadzin, el Vaticano Armenio, que forma parte de la lista del Patrimonio de la Humanidad.
El país de las montañas. Independiente de facto, aunque la mayoría de organismos internacioales aún consideran que forma parte de Azerbaiyán. Sólo se puede entrar allí desde Armenia, su población es étnicamente armenia y su cultura también. Disfrutamos durante tres días de este pequeño país.
Un escapada de finales de verano nos llevó a la Costa Azul francesa, una región que aún no conocíamos y que nos encantó. Fueron 4 días en lo que podríamos calificar de escapada low cost (aquí podéis ver el presupuesto), que pude disfrutar acompañado de mi padre y de mi hermana Dolores. Poco más adelante, una segunda escapada a Francia, esta vez temática, nos llevó a Eurodisney. En lugar de elegir un paquete por agencia nos lo gestionamos nosotros mismos, por lo que pudimos ir a Disneyland París por un precio mucho más barato.
Encuadrado dentro de nuestro viaje a la Costa Azul francesa disfrutamos de uno de los países más pequeños de Europa y que aún no conocíamos. El país del lujo y el glamur quizás no sea el más interesante de Europa ni a nivel histórico ni a nivel monumental, pero desde luego, sí que vale la pena disfrutarlo aunque sea por un solo día. Esta fue nuestra visita de un día a Mónaco.
Dos escapadas por España me permitieron conocer dos lugares que aún no había tenido la oportunidad de visitar. El primero, Málaga. Fui acompañado de mis amigos de toda la vida, por lo que fue un fin de semana de tres días donde conocecimos tanto la Málaga diurna como la nocturna. La segunda escapada, que fue a Madrid, me permitió conocer también una ciudad que forma parte de la lista del Patrimonio de la Humanidad y además, en mayúsculas: Alcalá de Henares, me pareció una ciudad preciosa. Si tenéis la oportunidad de visitarla, no lo desaprovechéis.
Fue el último viaje del año, que me llevó a uno de los 7 Emiratos Árabes, el de Dubai. Disfruté de algunos de los edificios más altos del mundo, como el Burj Khalifa, que tiene el record entre los rascacielos más altos del mundo, así como algunos de los centros comerciales más increíbles que se hayan construido, pero también de la zona vieja de Dubái, que ningún viajero de debería perderse y que es candidata a ser incluida en la lista del Patrimonio de la Humanidad.