10 DE LOS ACUEDUCTOS MÁS BONITOS DEL MUNDO.

¿Cuáles son los acueductos más bonitos del mundo? ¿Y los más famosos? Escribir acerca de 10 acueductos que haya tenido la oportunidad de visitar ha sido el nuevo reto que me he propuesto Florencio Moreno, uno de los blogueros decanos de la blogosfera española y que actualmente nos muestra sus viajes en su blog Mundandy.

He de reconocer que, en un principio, no sabía si llegaría a la cifra de 10 acueductos que me proponía. Luego, al recordarme que hay más acueductos que los romanos, comprendí que, en realidad, sí que habíamos visto bastantes acueductos alrededor del mundo (y particularmente, en Europa). De este modo me puse a recopilar los 10 acueductos más bonitos que he tenido la oportunidad de conocer.

LOS ACUEDUCTOS, DE ROMA AL SIGLO XX.

Cuando uno piensa en acueductos enseguida le vienen a la cabeza los acueductos romanos. No es de extrañar, pues fueron los ingenieros latinos los que generalizaron este tipo de construcciones y las convirtieron en verdaderas obras de arte de la ingeniería de todos los tiempos.

Ello permitió que poblaciones que estaban alejadas de las imprescindibles fuentes de agua pudieran abastecerse más allá de con el uso de aljibes y pozos que recolectaban la lluvia. Y es que el acueducto no es solo el bonito monumento que todos tenemos en la cabeza, si no el conjunto de canalizaciones que llevan el agua desde su origen hasta su destino. En realidad, la palabra latina aquaeductus significa precisamente eso: que transporta agua.

Los romanos, por tanto, fueron los que perfeccionaron los rudimentarios sistemas utilizados por anteriores civilizaciones, incluida la griega. Y, de hecho, varios de los acueductos más bonitos del mundo se remontan a la Antigua Roma, aunque continuaron desempeñando sus funciones hasta muchos siglos después de la caída de Imperio.

La importancia e influencia de la ingeniería romana fue tal que, en realidad, los nuevos acueductos que se alzaron más allá de la Edad Media siguieron utilizando, las técnicas desarrolladas por los ingenieros latinos.

Sin más, os dejo con la lista de 10 de los acueductos más bonitos del mundo.

10 DE LOS ACUEDUCTOS MÁS BONITOS DEL MUNDO.

ACUEDUCTO DE SEGOVIA.

Cuando uno piensa en Segovia enseguida le viene a la cabeza el monumental acueducto ubicado en la Plaza del Azoguejo. Muchos expertos opinan que el segoviano es el acueducto más bonito del mundo. Y lo sea o no, que para gustos los colores, lo cierto es que resulta extraordinariamente escénico con este conjunto de 167 arcos que tienen la particularidad de no estar unidos por argamasa.

Se trata de una construcción de principios del siglo II dC y que consigue trasladar las aguas del manantial de la Fuenfría hasta la ciudad de Segovia. Las 43 dobles arcadas superpuestas de la Plaza del Azoguejo son el emblema de la ciudad. En este punto, el de mayor altura, el acueducto alcanza los 28 metros. Sin embargo, el agua seguía más allá de esta zona, en forma de acueducto hasta el Alto de Postigo, y canalizada hasta la zona del alcázar.

ACUEDUCTO DE LES FERRERES. PONT DEL DIABLE, TARRAGONA.

Sí, ya sé que barro para casa esta vez, pero para mí, el acueducto más bonito del mundo no es el de Segovia si no el de les Ferreres, a pocos kilómetros de la antigua Tarraco. El sistema permitía acercar el agua del río Francolí hasta la antigua capital de la provincia romana de Hispania Citerior.

El acueducto fue edificado en el siglo I, en época de Augusto y tenía una longitud total de unos 25 kilómetros. El conjunto más conocido, el de las arquerías, suma 217 metros de longitud y 27 de altura en su parte más alta y, como el de Segovia, está compuesto por dos niveles de arcos diseñados con sillares y unidos sin necesidad de argamasa alguna.

Como explicaba, muchos de estos acueductos romanos superaron en longevidad a la de la propia Antigua Roma. El acueducto de les Ferreres o Pont del Diable estuvo en uso hasta entrado el siglo XVIII.

ACUEDUCTO DE LOS MILAGROS, MÉRIDA.

No podría faltar en esta lista de los acueductos más bonitos del mundo el que se encargaba de suministrar agua a Emérita Augusta, la que fuera la capital de la provincia romana de Lusitania. Esta obra traía el agua a la ciudad desde el Embalse de Proserpina, una obra romana del siglo I. Se trata de una de las obras más importantes que ver en Mérida y que nos recuerdan su pasado romano

La parte más espectacular es el de las arquerías que permiten superar los distintos arroyos y riachuelos, como el que salva el río Albarregas.

Se trata de una estructura construida en granito y ladrillo. Los distintos pilares se unen entre si gracias a las hiladas de ladrillo y de sillares de granito, en una estructura que es propia de Mérida. En el punto más vistoso, el acueducto de los Milagros suma una altura de 25 metros. Y aunque no resulta tan escénico como los acueductos de Segovia o les Ferreres, lo cierto es que también tiene mucho interés.

PONT DU GARD

Una de las estructuras romanas que mejor han llegado a nuestros días es este fabuloso acueducto situado en la Provenza. Esta obra fue construida sobre los años 40 y 60 d. C., en tiempos de Claudio y de Nerón. El objetivo fue llevar las aguas del río Eure hasta la población de Nemausus, la actual Nîmes, a través de un acueducto de 50 km. Se trató, por tanto, de una obra faraónica.

El Pont du Gard es la parte más espectacular del acueducto, sumando 49 metros de altura gracias a su triple arquería. En este tramo encontramos 6 arcos en el primer nivel, 11 en el segundo y 47 en el tercero. Esta estructura permite salvar el escollo del río Gardon, 25 kilómetros antes de que las canalizaciones lleven el agua hasta Nimes.

ACUEDUCTO DE AMOREIRAS, ELVAS.

Algunos de los acueductos más bonitos del mundo se encuentran en Portugal y no tienen nada que ver con el paso de la Antigua Roma por la Península Ibérica. Uno de ellos es el extraordinario Acueducto de Amoreiras de Elvas que, como los cuatro anteriores, forma parte del Patrimonio de la Humanidad.

Francisco de Arruda, arquitecto luso famoso por ser el autor de la lisboeta Torre de Belem, fue quien diseñó este acueducto que se encarga de traer las aguas a Elvas desde la cercana población de Amoreiras, del que toma su nombre.

Las obras del acueducto de Amoreiras se iniciaron en 1537, aunque las aguas no llegaron hasta el centro de esta ciudad alentejana hasta 1620. La longitud total del acueducto es de unos 8 kilómetros, aunque la parte más espectacular es el conjunto de 843 arcadas que encontramos ya en la ciudad de Elvas, que se elevan hasta los 31 metros de altura.

ACUEDUCTO AGUA DA PRATA, EVORA.

Otro de los más bonitos acueductos del mundo es el Agua de Prata, de 19 kilómetros de longitud y que se encargó de abastecer la población de Évora desde mediados del siglo XVI. Es, por tanto, contemporáneo al de Elvas. De hecho, el autor del proyecto es también Francisco de Arruda. Se sabe de la existencia de un antiguo acueducto de época romana y del que el de Agua da Prata tomó su recorrido.

Este acueducto fue diseñado en ladrillo y traía las aguas desde las fuentes de Divor hasta el centro de la villa. Concretamente, hasta las Plaza do Giraldo. Sin embargo, la fuente original no ha llegado a nuestros días.

Durante un paseo por la ciudad de Évora nos daremos cuenta que parte del acueducto está integrado en el centro histórico. Sin embargo, donde mejor se puede apreciar la obra es saliendo a la ciudad extramuros por la Puerta da Lagoa. Se trata de una de los monumentos más bonitos que ver en Elvas, ciudad Patrimonio Mundial de la Humanidad.

ACUEDUCTO DE LAS AGUAS LIBRES, LISBOA.

Casi nadie parece recordar que uno de los acueductos más bonitos del mundo se encuentra en Lisboa. Ni tan solo solemos hablar de esta joya del siglo XIX los posts acerca de los lugares que hay que ver en Lisboa.

No hay que olvidar, sin embargo, que este acueducto de 19 kilómetros (y con ramificaciones que suman 58) es una obra magna. Juan V fue quien mandó construir este acueducto aunque la obra no se terminó hasta el siglo XIX. Para ello contó con la ayuda del ingeniero húngaro, Martell Károly, quien desempeñara la práctica totalidad de su obra en tierras lusitanas.

Se trata de uno de los acueductos más altos del mundo, con algún tramo que supera los 65 metros de altura, y se encarga de traer el agua desde la cercana Sintra. Es esta la zona más espectacular de este acueducto, cuando la obra supera el Valle de Alcántara.
La perfección de esta obra se podría resumir en un dato: el Acueducto de Aguas libres resistió sin problema alguno el devastador terremoto de 1755.

Atribución foto: Red Tuxer

ACUEDUCTO DE MORELLA.

Desde luego, también en España hay más acueductos a parte de los romanos. Uno de ellos es el de Morella, una de las más bellas ciudades medievales de la Península. La Sèquia Reial, que es como se conocer allí a esta estructura, supone una de las obras más importantes del gótico civil mediterráneo y fue alzada a partir del siglo XIII.

La estructura permite llevar el agua procedente del manantial de la Fuente de Vinatxos hasta el núcleo histórico de Morella. Aunque gran parte del acueducto son las canalizaciones de mampostería, casi al llegar a Morella nos encontramos con la parte más espectacular con una doble arcada ojival, típica del gótico, alzada en sillares y mampostería.

Atribución: Sento Acosta

ACUEDUCTO DE VALENTE, ESTAMBUL.

Otro de los acueductos más bellos bonitos del mundo es de Valente, en Estambul. Lleva el nombre de Flavio Julio Valente, coemperador romano del siglo IV, en una época en que su hermano Velentiniano I le había cedido la parte oriental del Imperio Romano.

Sin embargo, las obras habrían empezado al menos 50 años antes, quizá en época de Constantino el Grande, antes de que se dieran por terminadas el año 368. El proyecto permitía traer las aguas desde los bosques de Belgrado, en los arrabales de Constantinopla, hasta la cisterna ubicada en la plaza de Beyacit, donde era almacenada. El invento estuvo en activo hasta entrado el siglo XIX.

Su parte más excelsa, ocupa un profundo valle que en la actualidad ocupa el Bulevard Ataturk. En este punto se erigió una doble arcada que supera los 20 metros de altura, donde se conserva un tramo de más de medio kilómetro de longitud.

Atribución foto: Brian Jeffery Beggerly

ARCOS DE LAPA, RÍO DE JANEIRO.

Uno de los acueductos más bellos del mundo está en América. Me refiero al que es conocido como Arcos de Lapa, en pleno centro histórico de Río de Janeiro. Se trata, probablemente, de una de las obras de ingeniería más importantes que la metrópoli lusa erigió en sus colonias.

También conocido como Acueducto Carioca, fue concluido en la década de los 20 del siglo XVIII. La estructura más bella es la que encontramos en el barrio de Lapa, de la que toma el nombre, con una doble arcada de medio punto, encalada en blanco inmaculado y que tiene una longitud de unos 270 metros.

Y con esta obra alzada en tierras americanas termino esta lista de 10 de los acueductos más bonitos del mundo. Os remito a Florencio y a su blog Mundandy, donde nos mostrará sus preferencias.