El Modernismo Catalán será el objeto de este post. Como sabéis, el Modernismo Catalán ha sido un tema recurrente al que le hemos dedicado más de 20 posts en este blog. Sin embargo, en esta ocasión se tratará de una de nuestras habituales listas mensuales que compartimos con Dani y Florencio, autores de los blogs Viatges Pedraforca y Fmanega por el mundo, a los que en esta ocasión se unirá otra excelente viajera, Cristina, que lleva varios años ilustrándonos sobre el patrimonio mundial, particularmente europeo, en su bitácora Ida y vuelta blog de viajes.
Esta vez, sin embargo, este conjunto de 4 posts van a ser algo diferentes, a la vez que complementarios. Y creo que puede ser francamente interesante pues mientras Dani nos hablará de 10 obras del modernismo en Barcelona, yo lo haré acerca de 10 lugares modernistas de Cataluña más allá de Barcelona, Florencio escribirá sobre 10 obras modernistas de España más allá de Cataluña y Cristina hará lo propio con 10 lugares modernistas de Europa más allá de España.
Esta vez no voy a extenderme mucho en la introducción pues he hablado largo y tendido sobre el Modernismo Catalán en los distintos artículos que he publicado hasta la fecha. Solo comentar que este estilo se circunscribe en un movimiento artístico más amplio surgido en toda Europa durante el último tercio de siglo XIX (y también en América) y que recibe distintos nombres según el país a la vez que tiene sus propias particularidades y localismos pertenecientes a cada región. Modernismo en España, Art Nouveau en Francia y Bélgica, Sezession en Alemania y Austria o Liberty en Italia son estilos más o menos superponibles, como he comentado, con sus características propias.
Sin más os dejo con esta lista de 10 obras maestras del Modernismo Catalán.
10 OBRAS MAESTRAS DEL MODERNISMO CATALÁN FUERA DE BARCELONA.
CRIPTA DE LA COLONIA GÜELL en SANTA COLOMA DE CERVELLÓ. De ANTONI GAUDÍ.
Gaudí trabajó codo con codo con Eusebi Guell, importante empresario y miembro de la burguesía catalana. No solo diseñó su vivienda particular en Barcelona, el bello Palacio Güell de la Rambla catalana, si no otras muchas obras. Una de ellas fue la cripta de la colonia Güell, que no fue sí no una más de las muchas colonias fabriles que surgieron al calor de la revolución industrial.
En un principio, la cripta no debía ser nada más que la planta inferior de un templo de dos plantas cuyo diseño recuerda al de la Sagrada Familia. Sin embargo, aquel encargo nunca llegó a terminarse y lo único que ha llegado a nuestros días es esta interesante cripta, que Antonio Gaudí utilizaría como banco de pruebas para muchas soluciones que posteriormente trasladaría a la Sagrada Familia, como la revolucionaria técnica del cálculo de estructuras mediante la maqueta esteteostática o polifunicular. Puedes leer más acerca de la Cripta Güell aquí.
INSTITUT PERA MATA en REUS. De LLUÍS DOMÈNECH I MONTANER
Domènech i Montaner fue el segundo gran arquitecto del Modernismo Catalán, solo por detrás de Gaudí. Y curiosamente, parte de su obra la encontramos en la que fue la ciudad natal del autor de la Sagrada Familia, Reus, que a principios de siglo XX era la segunda ciudad catalana en importancia.
Una de las más bellas obras de Domènech en Reus es el Institut Pere Mata, un psiquiátrico que fue utilizado como banco de pruebas para la que sería una de sus obras maestras, el Hospital de Sant Pau de Barcelona. En esta obra, estructurada en distintos pabellones al igual que el hospital barcelonés, encontramos varias soluciones que luego utilizaría en Sant Pau: ladrillo, cerámica vidriada, vidrieras plomadas o bellas esculturas es lo que encontramos en esta obra capital del Modernismo Catalán. Puedes leer más acerca del Institut Pere Mata aquí.
CASA COLL I REGÀS en MATARO, de JOSEP PUIG I CADAFALCH
Josep Puig i Cadafach es el tercero en discordia de este triunvirato de grandes arquitectos que situaron al Modernismo Catalán a la cabeza de Europa en este nuevo estilo surgido a final del siglo XIX. Varias de las obras de Puig se localizan en Mataró, ciudad natal del arquitecto y de la que fue arquitecto municipal antes de marchar a Barcelona.
La Casa Coll i Regás fue diseñada para el empresario textil del mismo nombre. Se trata de una obra ciertamente ecléctica, donde la línea curva no es tan evidente como en la mayoría de obras modernistas catalanas. La balconada de la tribuna tiene reminiscencias góticas, la galería corrida del tercer piso, aires renacentistas, y la coronación de la fachada, de forma triangular, nos recuerda a la arquitectura flamenca. Sin embargo, el uso de la cerámica, el hierro forjado o el esgrafiado no dejan lugar a dudas de que se trata de una obra maestra del Modernismo Catalán. La Filosa, una delicada escultura de la fachada, obra de Eusebi Arnau, es un prodigio. Puedes leer más acerca de la Casa Coll i Regàs aquí.
TORRE DE LA CREU en SANT JOAN DESPÍ. De JOSEP MARÍA JUJOL.
Josep María Jujol fue uno de los grandes arquitectos del modernismo catalán aunque, desgraciadamente, siempre ha quedado en un segundo plano tras Gaudí, Domènech i Montaner y Puig i Cadafalch. Sin embargo, convertido en arquitecto municipal en la barcelonesa población de Sant Joan Despí, realizó aquí algunas de sus más insignes obras.
Una de las más brillantes obras de Jujol es esta vivienda de veraneo que su tía, Josefa Romeu, le encomendó alzar. Fue su primera obra en Sant Joan Despí y es un elogio a la línea curva y al trencadís, una de sus signos de identidad. Sus cúpulas han dado lugar a que esta pequeña mansión sea conocida como la Torre de los Huevos. Puedes leer más acerca de la Ruta Jujol de Sant joan Despí aquí.
MASIA FREIXA en TERRASSA. De LLUÍS MUNCUNILL.
Buena parte de la obra del arquitecto Lluís Muncunill la encontramos en Terrassa, ciudad de la que fue arquitecto municipal. Una de las obras más interesantes es la Masía Freixa, una construcción que combina lo que es una vivienda tradicional catalana con las innovaciones propias del modernismo (como atestiguan la proliferación de arcos catenarios) y un toque bizantino e incluso, islamizante, en base al juego de cúpulas, cupulillas y una torre que parece semejar un minarete.
Aunque el origen de la masía no era otro que el de albergar una fábrica de hiladuras, Muncunill la transformó en la vivienda del industrial Josep Freixa i Argemí. Tuvimos la oportunidad de visitarla durante la Fira Modernista de Terrassa.
CATEDRAL DEL VINO en NULLES. De CÉSAR MARTINELL.
Una de las obras más importantes del modernismo catalán en su vertiente industrial y paradigma de las muchas bodegas cooperativas que se alzaron a finales del siglo XIX e inicio XX, tras la terrible plaga de la filoxera que asoló, casi por completo, los campos de vides de toda Europa.
Se trata de un modernismo mucho más funcional, alejado del uso más recreativo y vanguardista de las viviendas levantadas por orden de la burguesía catalana. César Martinell fue el arquitecto más prolífico en este tipo de construcciones que usan los materiales propios del lugar como materiales casi únicos de construcción. En este caso, el ladrillo fruto de la piedra arcillosa de la comarca y la piedra calcárea responsable de las partes más bajas del edificio. Los arcos parabólicos, tan típicos del modernismo catalán y particularmente de la obra de Gaudí, se convierten en las bodegas modernistas en un signo de identidad casi universal. Puedes leer más acerca de la Catedral del Vino de Nulles aquí.
CASA BARBEY en LA GARRIGA. De MANUEL RASPALL.
Aunque no sea tan famoso como Domènech i Montaner o Gaudí, también Manuel Raspall es una figura destacadísima del modernismo catalán. Buena parte de su trabajo se localiza entre las vallesanas poblaciones de Cardedeu y La Garriga, donde existen sendas Rutas Raspall de enorme interés.
La Casa Barbey es la más interesante de todas su obras. La encontraréis en La Garriga, junto a tres más de sus edificaciones, en una misma manzana. Se trata de la más destacada obra de la que es conocida como arquitectura modernista de veraneo, surgida en un tiempo en que la burguesía acomodada pasaba los veranos en poblaciones cercanas a la capital catalana, de clima más benigno y, particularmente, de aires más puros que los de la industrial Barcelona.
Por desgracia no es habitual poder visitar su interior (esta vivienda, por cierto, está en venta), aunque en algunas ocasiones sí que lo es pasear por sus jardines. La cerámica, el mosaico, el trencadís y el dominio de la curva, elementos habituales en el modernismo catalán se dan cita en esta formidable mansión. También las continuas alusiones a Cataluña y su imaginario, incluidos dragones y Sant Jordis, algo casi universal también en las obras modernistas de Cataluña.
JARDINES ARTIGAS en LA POBLA DE LILLET. De ANTONI GAUDÍ.
En esta ocasión no se trata de una obra arquitectónica si no paisajística. Gaudí agradeció la hospitalidad de la familia Artigas que le dio cobijo mientras trabajaba en el cercano Chalet de Catllarás, una pequeña villa que debía albergar a los trabajadores de la mina de carbón de esta población, que suponía el combustible más importante para el funcionamiento de la Cementera Asland, propiedad de Eusebi Güell, principal mecenas de Gaudí.
Se trata de una de las obras más importantes del modernismo catalán en cuanto a paisajismo y urbanismo, solo por detrás del Park Güell de Barcelona. Puentes con arcos, fuentes, cascadas o bonitas pérgolas se dan cita en una de las escasas obras que Gaudí realizó fuera de Barcelona. Puedes leer más acerca de los Jardines Artigas aquí.
SANTUARIO DE LA VIRGEN DE MONTSERRAT en MONTFERRI. De JOSEP MARIA JUJOL.
La segunda de las obras de Josep María Jujol que incluimos en esta lista 10 de las mejores obras del Modernismo Catalán fuera de Barcelona es una de las más originales. Este santuario, que Jujol jamás vio terminado, tiene una evidente semejanza con la Sagrada Familia de Gaudí. Y no es extraño, pues Jujol fue mano derecha del reusense, con quien trabajó codo con codo a lo largo de su vida.
El santuario fue alzado durante la década de los años 20 del siglo pasado, pero se interrumpió por falta de recursos. Solo se reinició a partir de 1987 siguiendo los planos de Jujol así como los materiales, poco nobles, que había dispuesto el arquitecto. Y la verdad es que se ha convertido en una de las obras más originales del Modernismo Catalán.
CASA DOMÈNECH I MONTANER en CANET DE MAR. De LLUÍS DOMÈNECH I MONTANER.
Aunque las obras más importantes de Domènech debemos buscarlas en Barcelona, también en Canet de Mar, a 40 kilómetros de la capital catalana, encontramos varios ejemplos de su genio. Ello es debido a que el fenomenal arquitecto veraneó durante muchos años en esta pequeña población marinera hasta el punto de construirse una bonita mansión esquinera donde Domènech había decidido retirarse junto a su familia tras su jubilación.
Domènech rehabilitó una vivienda ya existente (algo muy habitual en el Modernismo Catalán) dotándola de los atributos que lo habían convertido en una de las grandes figuras de modernismo.
El arquitecto decoró esta mansión con varios de los modelos utilizados para ornamentar algunas de sus obras más emblemáticas, como la barcelonesa Casa Lleó i Morera o la Universidad Pontificia de Comillas. La Casa Domènech está estupendamente museizada y supone uno de los más bellos ejemplos del Modernismo Catalán fuera de Barcelona.
Y con esta obra terminamos esta lista de 10 de las obras más importantes del Modernismo Catalán fuera de Barcelona. Es ahora un buen momento para echar un vistazo a lo que nos proponen nuestros compañeros:
- Dani de Viatges Pedraforca: el Modernismo en Barcelona.
- Florencio de Fmanega por el Mundo: el Modernismo en España.
- Cristina de Ida y vuelta blog de viajes: el Modernismo en Europa.
Comentarios:
11 comentarios en “MODERNISMO CATALÁN. 10 obras maestras más allá de Barcelona.”
Me encanta el modernismo catalán, por desgracia aunque he visto unos cuantos de esos edificios que cuentas, me quedan unos pocos y algunos ni siquiera sabía que existían así que me los apunto. En Lleida por ejemplo vi maravillas, y en Teruel también y cerquita de aquí por supuesto hay que hablar de los de Comillas (capricho), León (Botines) y Astorga (Palacio Episcopal). Realmente maravillosos todos.
Una maravilla de recopilación Jordi! Felicidades por este gran post!
Un abrazo
Carmen
Pues mira que en Teruel no tenía conocimiento de la existencia de lugares modrnistas. No la hemos visitado! En Comillas, León y Astorga si que he estado. Y espero regresar a Comillas en un par de meses!
Un beso, Carmen.
Aunque conozco varias obras modernistas de Barcelona, de las del resto de Cataluña no conozco ninguna. Después de leer tu post veo todo lo que me he perdido. Hay verdaderas obras de arte. En cuanto tenga ocasión iré a visitar todas las que pueda.
Un abrazo.
Así es Mar. Casi siempre nos quedamos con Barcelona y la verdad es que fuera de la capital hay un montón de lugares modernistas que merece mucho la pena conocer. Espero que te animes a venir por nuestra tierra!
Un beso, Mar.
Hola,
me sorprende no encontrar ninguna referencia, ni en el post ni en los comentarios a Zamora. En la ruta europea del modernismo, están incluidas sólo dos ciudades españolas: Barcelona (obviamente) y Zamora. Uno de los díscipulos mas avanzados de Gaudí realizo muchas edificaciones en la ciudad castellano-leonesa…lo que por desgracia no es muy conocido, ya que la ciudad perdió hace mucho la importancia que tuvo en el pasado.
Un saludo.
Hola Viktor.
Ante todo muchas gracias por pasarte por aquí y comentar. Si has leído la introducción verás que escribía que este era un post que formaba parte de una serie de 4. Mientras que yo me ceñía a 10 ciudades modernistas de Cataluña, Florencio ha escrito en su post acerca de 10 ciudades modernistas fuera de Cataluña.
Por cierto, no se si has leído el post que tengo sobre Zamora. Allí sí que hago una referencia al modernismo en la ciudad.
Por cierto, creo que hay varias ciudades españolas inscritas en la Ruta Europea del Modernismo. Entre ellas, la ciudad donde vivo: Mataró. Pero también, Reus, Novelda, Melilla, Teruel o Zamora. Aquí las tienes todas.
Un abrazo y gracias por el comentario!